Donald Trump Jr., hijo del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, viajó a Groenlandia en medio del renovado interés de su padre por que la isla se convierta en parte de Estados Unidos. Este territorio autónomo de Dinamarca ha sido objeto de declaraciones polémicas, donde Trump ha sugerido públicamente la posibilidad de comprar Groenlandia, calificándola como un “increíble lugar con gran potencial”.
Desde su red Truth Social, Trump expresó que Groenlandia obtendría “enormes beneficios” al integrarse a Estados Unidos, asegurando que la nación protegería y valoraría la isla en un “mundo exterior muy hostil”. Incluso adaptó su icónico lema al contexto: “¡Hagamos Groenlandia grande de nuevo!”.
Aunque la delegación liderada por Trump Jr. no incluye reuniones oficiales con las autoridades locales, el hijo del presidente electo declaró estar “emocionado” por explorar la región y disfrutar de su estancia. Sin embargo, el primer ministro groenlandés, Mute Egede, reiteró que la isla “no está en venta y nunca lo estará”, enfatizando la amplia autonomía de Groenlandia frente a Dinamarca, aunque su política exterior y de defensa aún dependen de Copenhague.
Donald Trump, quien asumirá nuevamente la presidencia el 20 de enero, ha dejado claro su interés en fortalecer la presencia estratégica de Estados Unidos en el Ártico, una región importante para la geopolítica y el comercio internacional. Sin embargo, el planteamiento de anexar Groenlandia sigue siendo polémico y ha generado diversas reacciones a nivel internacional.