La provincia de Valencia ha sido devastada por una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que ha dejado 62 muertos y provocado un caos generalizado. Con precipitaciones que superaron los 500 litros por metro cuadrado en algunas zonas, este episodio es considerado uno de los peores desastres naturales en la región, comparable incluso con la “Pantanada de Tous” de 1982.
Las fuertes lluvias causaron el desbordamiento de ríos y barrancos, incluyendo el conocido Barranco del Poyo, cuyo desbordamiento trágico cobró varias vidas en la localidad de Aldaia, donde el agua arrasó viviendas de planta baja como un “tsunami”, según el alcalde Enrique Luján.
Este y otros desbordamientos han aislado completamente varias localidades, como Paiporta, donde la alcaldesa Maribel Albalat informó que la infraestructura ha colapsado y el pueblo está incomunicado.
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Flood Destruction in Spain
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— World Crisis Tracker (@WorldCrisi19621) October 30, 2024
Evacuación y rescate en marcha
Cientos de personas han sido evacuadas de sus hogares y trasladadas a refugios en Valencia. El Ayuntamiento de la ciudad ha habilitado complejos como La Petxina y La Alquería del Basket para acoger a los desplazados, mientras Protección Civil ha solicitado a la población evitar desplazamientos debido a las condiciones extremas de las carreteras, la mayoría de las cuales permanecen intransitables.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha activado el “Procedimiento de Múltiples Víctimas” y ha movilizado a la Unidad Militar de Emergencias (UME) con efectivos adicionales procedentes de otras provincias. La delegada del Gobierno en Valencia, Pilar Bernabé, confirmó que hasta 400 efectivos de la UME han llegado a la zona para apoyar las labores de rescate y control de daños.
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, expresó su solidaridad y aseguró que se proporcionará el apoyo necesario a los afectados, mientras el rey Felipe VI ha emitido un mensaje de pésame y precaución para la ciudadanía.