En un comunicado conjunto, los gobiernos de Colombia, México y Brasil han pedido a las autoridades electorales de Venezuela que publiquen “de forma expedita” los datos desglosados de las mesas de votación de las recientes elecciones presidenciales. Esta solicitud llega cuatro días después de que el Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) anunciara la victoria de Nicolás Maduro, en medio de una disputa por los resultados electorales.
El llamado a la transparencia se une a las críticas de otros países y organizaciones internacionales. Estados Unidos, Chile, Costa Rica, Panamá, la Organización de Estados Americanos y el Centro Carter de Estados Unidos han cuestionado los resultados de las elecciones, mientras que en Venezuela, las calles se llenan de manifestaciones masivas exigiendo claridad.
El apoyo de tres gobiernos influyentes de izquierda, cercanos ideológicamente a Maduro, como el de Gustavo Petro en Colombia, Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil y Andrés Manuel López Obrador en México, aumenta la presión sobre las autoridades venezolanas para que transparenten el proceso electoral. Estos líderes han insistido en que las controversias se resuelvan por la “vía institucional” y se han mostrado dispuestos a apoyar el diálogo y la búsqueda de acuerdos en beneficio del pueblo venezolano.
El comunicado subraya la necesidad de resolver el conflicto a través del diálogo y la cautela, solicitando la publicación de los datos electorales. Además, expresa solidaridad con el pueblo venezolano que participó en las elecciones el 28 de julio, y afirma que seguirán con atención el proceso de escrutinio de votos.
El gobierno de Maduro y la oposición, liderada por Edmundo González Urrutia, se han declarado ganadores de las elecciones, mientras la oposición acusa de fraude al gobierno. Hasta ahora, no se han presentado resultados finales ni documentos que respalden las cifras oficiales, a pesar de la insistencia de la comunidad internacional y varios gobiernos latinoamericanos.
El comunicado también insta a los actores políticos y sociales a ejercer la máxima cautela y contención en sus manifestaciones para evitar una escalada de violencia. La misiva reitera el respeto por la soberanía del pueblo venezolano y la disposición de apoyar los esfuerzos de diálogo y búsqueda de acuerdos.