La policía de Perú localizó el cuerpo momificado del alpinista estadounidense William Stampfl, quien había desaparecido hace 22 años en el nevado Huascarán. Stampfl, cuyo cuerpo fue descubierto tras un desglaciamiento, había sido reportado desaparecido en 2002 mientras ascendía el monte de 6,757 metros de altura.
El desglaciamiento, atribuible al cambio climático, dejó al descubierto los restos de Stampfl en la región Áncash, a unos 40 kilómetros de Lima. Las condiciones extremas del nevado, con temperaturas nocturnas que alcanzan los 19 grados bajo cero, permitieron la conservación del cuerpo durante más de dos décadas.
El cuerpo de Stampfl fue encontrado a una altura de 5,200 metros, cerca del campo uno del nevado Huascarán, una zona conocida por sus grietas y peligros. El alpinista quedó sepultado por una avalancha de nieve, y su cuerpo, junto con su vestimenta y equipo de escalada, se mantuvo en buen estado de conservación.
Entre las pertenencias de Stampfl se encontraron su ropa para escalar, arnés, botas con grampones. También se descubrió un pasaporte que reveló que tenía 59 años en el momento de su desaparición.
El hallazgo de Stampfl no es un caso aislado. La desglaciación en la Cordillera Blanca ha llevado al descubrimiento de otros cuerpos de alpinistas en meses recientes. En junio, se encontró el cadáver de un escalador italiano que había sufrido un accidente en el nevado Cashan.
La Cordillera Blanca, que alberga montañas como el Huascarán y Cashan, es una zona turística popular entre escaladores de todo el mundo. Sin embargo, el cambio climático y el desglaciamiento presentan nuevos retos y peligros para los aventureros que se enfrentan a estas montañas.
El cuerpo de Stampfl ha sido trasladado a la morgue de la ciudad de Yungay, y las autoridades están en proceso de contactar a su familia para los arreglos correspondientes.