En un momento crucial para la paz en Oriente Medio, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha asegurado que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, apoya plenamente el plan de alto el fuego en Gaza. Este plan ha sido propuesto por el presidente estadounidense, Joe Biden, y respaldado por una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Antony Blinken, en declaraciones realizadas durante su gira por la región, mencionó que Netanyahu reafirmó su compromiso con la propuesta durante una reunión sostenida la noche anterior. Blinken también se ha reunido con varios líderes políticos israelíes, incluidos miembros de la oposición, y con el primer ministro de la Autoridad Palestina.
El plan de alto el fuego se divide en tres fases. La primera fase incluye un intercambio de rehenes por presos y un alto el fuego a corto plazo. La segunda fase prevé un “cese permanente de las hostilidades” y la retirada total de las fuerzas militares israelíes de Gaza. Finalmente, la tercera fase implica un plan de reconstrucción de varios años para la Franja de Gaza.
Según Blinken, “todo el mundo” está a favor de la iniciativa, excepto Hamás. Blinken sugirió que incluso si Hamás aprobara el plan de Biden, el Gobierno israelí no cambiaría su postura. Además, Blinken enfatizó que cualquier avance hacia un alto el fuego permanente debe ser negociado.
El plan de alto el fuego es visto como una medida objetiva y beneficiosa para todos los involucrados, garantizando la paz y la seguridad en la región. La fase de negociación es crucial para mantener el alto el fuego inmediato, y el éxito del plan podría significar un cambio significativo en la dinámica del conflicto en Gaza.
