El presidente argentino Javier Milei aterrizó en Tel Aviv, iniciando su visita oficial a Israel. A su llegada al Aeropuerto Internacional Ben Gurión, Milei fue recibido por el Ministro de Asuntos Exteriores israelí, Israel Katz. En una breve interacción, Milei reiteró su “plan” de trasladar la embajada argentina de Tel Aviv a Jerusalén occidental.
Al expresar su honor y placer de estar en Israel, Milei enfatizó su compromiso con el traslado de la embajada. Un video compartido en las redes sociales capturó al presidente elogiando la “legítima defensa” de Israel contra los terroristas de Hamas, reafirmando su intención de trasladar la embajada argentina durante su presidencia, una postura expresada inicialmente durante la campaña electoral.
Gracias a usted, señor presidente @JMilei por su afirmacion sobre el translado de la embajada de Argentina en Israel a Jerusalem, la Capital 🇮🇱🇦🇷
Viva La Libertad Carajo! pic.twitter.com/h1VO2kNuAs
— ישראל כ”ץ Israel Katz (@Israel_katz) February 6, 2024
Israel Katz reconoció el compromiso de Milei en las redes sociales y le agradeció haber afirmado el traslado de la embajada a Jerusalén, la capital. Katz concluyó su mensaje con una enérgica proclamación de libertad.
La visita de Milei a Israel es parte de una gira internacional más amplia que también lo llevará a Italia y el Vaticano, donde tiene previsto reunirse con el papa Francisco. Este viaje tiene un significado simbólico mientras Milei, un firme partidario de Israel, navega por las discusiones diplomáticas en medio del conflicto de Gaza.
La visita del presidente argentino a Tierra Santa se alinea con su promesa de campaña y resuena con su postura pro-Israel. Eli Cohen, excanciller israelí, felicitó previamente a Milei por su victoria electoral y lo invitó a fortalecer las relaciones bilaterales e inaugurar la Embajada argentina en Jerusalén, enfatizando los estrechos vínculos entre ambas naciones.
Mientras Milei se embarca en esta aventura diplomática, siga de cerca los acontecimientos en las relaciones argentino-israelíes y las implicaciones más amplias de su visita a Israel, Italia y el Vaticano.