Las persistentes lluvias torrenciales han sumido a la ciudad griega de Volos en la desesperación, repitiendo el caos experimentado hace poco más de veinte días con la tormenta Daniel. En esta ocasión, la tormenta Elías ha traído consigo inundaciones que han forzado la evacuación de más de 250 personas en la zona.
LAMENTABLE ☔️ así amanece
Volos, Grecia 🇬🇷 afectada nuevamente por la tormenta #Elias.
Terrible situación. pic.twitter.com/8KZ4fwW0XH— 𝗡𝗢𝗧𝗜𝗖𝗜𝗔𝗦 𝗘𝗡 𝕏 (@noticiasenx) September 28, 2023
El miércoles por la tarde, la tormenta descargó lluvias tan intensas que el nivel del agua en la ciudad y sus alrededores se elevó rápidamente en cuestión de horas. Además, un arroyo cercano se desbordó, exacerbando aún más las ya catastróficas inundaciones.
El alcalde de Volos, Achilleas Beos, informó que los cortes de electricidad causados por la tormenta y las inundaciones dejaron al 80% de la ciudad en la oscuridad el miércoles por la noche. Como medida de seguridad, las autoridades prohibieron la circulación de vehículos en las carreteras, instando a la población a permanecer en sus hogares para su protección.
La Tormenta Elias azota Volos, Grecia.
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— Alerta Cambio Climático (@AlertaCambio) September 27, 2023
La tormenta Elías representa la segunda catástrofe que ha golpeado la región en cuestión de semanas, siendo Daniel la tormenta más intensa que ha azotado Grecia desde 1930 a principios de septiembre. Muchos residentes de Volos han expresado su frustración, afirmando que las autoridades no se habían preparado adecuadamente para una nueva tormenta, considerando las secuelas devastadoras que dejó la anterior tormenta.
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— Meteo Extrema (@meteoextrema) September 27, 2023
El impacto de Daniel se tradujo en un mar interior en el centro de Grecia, donde se inundaron viviendas, infraestructuras viarias, y granjas cerca de Volos, Karditsa y Larissa. Miles de animales perecieron y los cultivos quedaron arrasados, dejando a los residentes de las zonas afectadas luchando por recuperarse.
La tormenta Daniel también causó estragos en el Mediterráneo, extendiéndose desde Grecia hasta Libia, donde una inundación masiva en la ciudad de Derna resultó en la trágica pérdida de más de 2,500 vidas.
