Después de una semana del paso del huracán Daniel por Libia, las autoridades de ese país continúan con la búsqueda de desaparecidos y la recuperación de cadáveres en el mar.
Hasta el momento, la cifra de víctimas mortales ocasionadas por el fenómeno meteorológico supera las 11 mil, sin embargo, las autoridades temen que esta llegue a 20 mil o rebase ese número.
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— Hành trình tích cực (@tranhung38705) September 16, 2023
Además se tiene un registro de al menos 30 mil personas desaparecidas y una cantidad no calculada de damnificados que perdieron a sus seres queridos, así como sus patrimonios y medios de vida.
Además del desolador futuro inmediato que se presenta a los habitantes de ese país africano, las autoridades también consideran que podría surgir una crisis sanitaria por el gran número de cuerpos sin vida a la intemperie.
Este es el desierto de Al-Mukhaili, ahogado por torrentes tras las catastróficas inundaciones que dejaron miles de muertos en Libia 🇱🇾 Sobrevivientes dicen que nunca habían visto algo como esto antes. #Libya #floods pic.twitter.com/8Bj6VCR6eu
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La emergencia que ocasionaron las inundaciones es tan grande que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) liberó un paquete de 10 millones de dólares de su fondo de emergencias para ayudar a los damnificados.
De acuerdo con Martin Griffiths, secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios y coordinador del Socorro de Emergencia, la magnitud del desastre provocado por las inundaciones es “estremecedora y desgarradora, barrios enteros ha sido borrados del mapa”.
Crítica situación de Libia
Antes de la tragedia que dejó el paso del huracán Daniel, Libia enfrentaba un grave problema de violencia derivado de la inestabilidad política desde 2011.
Debido a esa situación, durante varios años, al igual que ocurre con otras instalaciones, no se le dio mantenimiento a la red de observación meteorológica del país.
Se cree que de haber contado con los sistemas de alerta temprana adecuados, se podría haber evacuado a la población a tiempo y, de esta manera, evitado el alto número de decesos.
“La tragedia de Libia pone de relieve las consecuencias devastadoras y en cascada de las condiciones meteorológicas extremas en los Estados frágiles y muestra la necesidad de sistemas de alerta temprana de peligros múltiples, que abarquen todos los niveles de gobierno y de la sociedad”, indicó Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU.