La empresa de gas estatal rusa Gazprom confirmó que el servicio de bombeo del hidrocarburo, por el gasoducto Nord Stream 1, es solo al 20 por ciento de la capacidad. Por lo que no puede enviar más ya que se necesita de la turbina que está en Canadá y del motor en Alemania.
Así lo dio a conocer por medio de su cuenta de Telegram la misma empresa, quien señaló a Canadá, Reino Unido y a la Unión Europea de ser los culpables de la deficiencia en el servicio. Esto al emitir y mantener las sanciones de importaciones a Rusia.
Por lo que las piezas faltantes no pueden ser enviadas a la nación euroasiática y de esta forma dar por concluidas las labores de mantenimiento en la estación compresora Portovaya. Recordando que la suspensión del gas originalmente se dio en julio bajo el argumento de que era por labores de mantenimiento en el gasoducto.
Mientras que Olaf Scholz, canciller alemán, aseveró que esta es una maniobra sucia de la administración de Vladimir Putin en respuesta a las sanciones establecidas contra su país por la invasión a Ucrania. Ya que afirmó que el gobierno alemán tiene el motor que necesita la turbina, pero que este no ha sido pedido por el gobierno ruso.
Agregando que, de incumplir el contrato vigente, Gazprom podría sumar más sanciones contra la nación rusa por parte de los países afectados. Ya que la época invernal se está acercando y el suministro del gas es vital para que las naciones no se vean afectadas o recurran a otras fuentes de energía.