Después de negar por 40 años que había cometido un delito, ayer las autoridades dictaminaron que Kevin Strickland era inocente de los cargos que se le imputaban. Así se dio a conocer a través de los medios locales en Estados Unidos, quienes pusieron en duda el sistema legal de ese país.
En 1981, Strickland fue declarado culpable de un triple asesinato que, según un jurado de Missouri, cometió a sangre fría. Sin embargo, el día de ayer por la noche el juez James Welsh anuló la sentencia condenatoria que mantuvo tanto tiempo a Kevin tras las rejas. Esto basado en el fallo judicial que el fiscal Jean Peters Baker dictaminó, en el cual manifestaba que todas las pruebas presentadas en contra del acusado habían sido refutadas sin lugar a dudas.
La Fiscalía ya había admitido su error desde mayo de este año debido a que los verdaderos culpables se habían entregado y confesado los hechos, desde noviembre de hace un año. Sin embargo, la Corte Suprema de Missouri se negó a aceptar los hechos y no permitió que Strickland saliera libre, esto debido a que consideraban sospechoso el hecho de que los acusados se entregaran después de tanto tiempo.
Por lo cual, Kevin Strickland se apegó a una ley local que dictamina que los fiscales pueden interceder ante la corte si creen que el acusado sigue en la cárcel injustamente. De esta forma y después de un largo proceso legal, el acusado quedó absuelto de un crimen que no cometió y salió libre a los 62 años de edad, cuando entró de 22.