A partir de este 1 de noviembre, entran en vigor las nuevas tarifas para el consumo de agua en Puebla, aplicables tanto a usuarios con medidor como a aquellos que carecen de este dispositivo, así como las cuotas de reconexión en caso de suspensión del servicio. La actualización de las tarifas establece precios diferenciados por tipo de uso y volumen de consumo, afectando principalmente a sectores comerciales, industriales y de servicios públicos.
Para quienes cuentan con un medidor de consumo, el costo se calcula en función del volumen de agua utilizado. Por ejemplo, para consumos entre 60 y 80 metros cúbicos, las tarifas oscilan entre 26.28 pesos por metro cúbico para el sector oficial y hasta 40.80 pesos para usos comerciales, industriales y públicos. En el rango de 80 a 100 metros cúbicos, los precios suben hasta 49.59 pesos para sectores comerciales e industriales.
Para los usuarios sin medidor, el esquema tarifario opera bajo cuotas fijas, que varían según el tipo de uso y el estrato socioeconómico. Los domicilios domésticos del estrato más bajo (1, 2 y 3) pagarán 163.40 pesos, mientras que los del estrato 6, el más alto, tendrán un costo de mil 472.53 pesos mensuales. Para el uso industrial, la cuota fija es de 8 mil 543.75 pesos.
En caso de que el servicio de agua sea suspendido por falta de pago, la nueva tarifa de reconexión también ha sido modificada, con un costo de mil 153 pesos para el uso doméstico y de hasta 4 mil 303 pesos para el uso industrial. Estos costos aumentan si la reconexión requiere obras adicionales, alcanzando hasta 7 mil 482 pesos para la industria.
La actualización tarifaria busca equilibrar el uso y mantenimiento del recurso hídrico en el estado, aunque los ajustes han generado preocupación en diversos sectores. Expertos advierten que el aumento en las tarifas podría impactar a pequeñas y medianas empresas, así como a organizaciones que prestan servicios de asistencia social.
Las autoridades locales, por su parte, argumentan que estos incrementos son necesarios para garantizar la sostenibilidad y calidad del suministro en los próximos años. Se espera que las nuevas tarifas impulsen un uso más eficiente del agua en Puebla, especialmente en áreas de alta demanda y consumo.