En el estado de Puebla, el 50.5 por ciento de los trabajadores, equivalentes a un millón 507 mil 848 personas, reciben únicamente un salario mínimo mensual de 7 mil 468 pesos, según información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Esta cifra coloca a Puebla en el cuarto lugar a nivel nacional en cuanto a la cantidad de personas con bajos ingresos, solo superada por el Estado de México, la Ciudad de México y Veracruz.
La mayoría de estos trabajadores se concentra en los sectores primario y terciario, como la agricultura, ganadería, comercio y preparación de alimentos.
Además de los bajos salarios, estos trabajadores enfrentan carencias laborales como empleos informales sin prestaciones, jornadas laborales largas y agotadoras, y falta de beneficios como crédito para vivienda, seguridad social y vacaciones pagadas.
Solo el 0.5 por ciento de los trabajadores poblanos perciben más de cinco salarios mínimos, mientras que el 27.6 por ciento gana hasta dos salarios mínimos y el 6.0 por ciento hasta tres salarios mínimos.
Esta situación laboral representa un desafío para las autoridades y la sociedad en general, ya que afecta la calidad de vida de miles de personas en el estado de Puebla.
