Durante los años 2022 y 2023, la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT) de Puebla no registró la cantidad de unidades de transporte público que cuentan con botones de pánico, a pesar de que es un requisito obligatorio de la Ley de Transporte.
A través de una solicitud de transparencia, Movilidad y Transporte detalló que no se contempló durante la inspección físico-mecánica del transporte público si las unidades contaban con el botón de pánico, el cual se conecta con el Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C5).
Aunque, en el artículo 45 de la Ley de Transporte de Puebla se indica como obligatorio que el transporte cuente con botón de pánico y cámara de vigilancia, mientras que el artículo 241 señalá que durante la inspección físico-mecánica se debe revisar el equipo de seguridad y emergencia.
Cabe recordar, que en octubre de 2019, Guillermo Aréchiga Santamaría, ex titular de Movilidad y Transporte, prometió que en 120 días todas las unidades contarían con botones de pánico y cámara de seguridad y en caso de que algún concesionario no las colocara les serían retiradas sus unidades.
Ahora bien, en junio de 2022 el plazo venció, por lo que Elsa Bracamonte González, ex secretaria de la dependencia admitió que no todas las unidades contaban con dichas herramientas de seguridad, debido a la resistencia de algunos concesionarios.
Ante esto, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina dijo que espera contar con el tiempo suficiente para que los botones de pánico y cámaras de vigilancia queden instaladas en las unidades.