A unos días de que estalló la huelga en la empresa automotriz Audi, el gobernador del estado de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, confió en que pronto se resuelva el conflicto laboral, una vez que descartó que afecte al estado en las inversiones, y subrayó que los subsidios que se otorgan a la planta se mantienen.
Dejó en claro que el Gobierno estatal es respetuoso de la vida laboral y de la base sindical en torno a las decisiones que tomen, además de que es una competencia que está fuera del alcance del estado para intervenir.
“Pronto se resolverá”, señaló el mandatario estatal y confió en que se recuperará el tiempo perdido de la producción en la planta alemana ubicada en el municipio de San José Chiapa.
Abundó que tanto la base laboral del Sindicato Independiente de Trabajadores de Audi de México (Sitaudi) como la empresa automotriz tienen su derecho de discutir la situación laboral.
“El llamado es al diálogo, la vía adecuada para alcanzar los acuerdos precisos, hago votos para que muy pronto esté resuelto este problema, no es lo más sano para Puebla; sin duda, tampoco podemos cerrar los ojos a esta realidad, pero estamos seguros que es una excepción y que muy pronto pasará”, indicó Céspedes Peregrina.
Sobre los subsidios que el Gobierno está obligado a otorgar a este tipo de empresas, como lo establece la Ley de Desarrollo Económico, el mandatario sostuvo que “siguen firmes” y no se prevé hacer un cambio.
Reiteró que hay un “respeto absoluto y respaldo” a la base trabajadora y la empresa.
Finalmente, comentó que las secretarías de Economía y de Trabajo del Gobierno estatal no pueden interceder en esta situación, pero sí están al pendiente de su evolución desde que inició la negociación.
“Audi es una gran empresa, yo puedo decirlo con claridad, ya es un orgullo de Puebla como lo es Volkswagen, reconocemos la fortaleza, la derrama económica, el beneficio de miles de familias que trabajan de forma directa e indirecta y esperemos que pronto haya los acuerdos para que se resuelva”, señaló el mandatario estatal.
El desacuerdo entre la base laboral y la empresa es que la primera no aceptó del 6.5% de aumento en la revisión anual correspondiente al 2023 que otorgó la empresa, ya que el sindicato se mantiene en la postura de que sea un alza global del 15.5%, entre prestaciones e incremento directo salario.