El presidente de México, Enrique Peña Nieto, acompañado por el gobernador del estado, Rafael Moreno Valle, inauguró el tramo final del nuevo Corredor México-Tuxpan, cuya inversión fue de 8,939 millones de pesos.
Durante el acto, realizado este miércoles por la tarde, en el que también estuvieron presentes los mandatarios de Veracruz y del Estado de México, Javier Duarte de Ochoa y Eruviel Ávila Villegas, respectivamente, el Ejecutivo federal, aseguró que obras como ésta amplían la modernidad del país, aunado a ello, brindan más oportunidades que permiten la generación de nuevos empleos.
En este sentido, Peña Nieto, reiteró que el compromiso de su gobierno es crear mayores y mejores empleos en beneficio de los mexicanos.
En el uso de la palabra, Gerardo Ruiz Esparza, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), detalló que el tramo denominado “Nuevo Necaxa-Ávila Camacho”, de 37 kilómetros de longitud, contempló la construcción de cuatro carriles, seis túneles, nueve puentes, dos viaductos, 13 puentes inferiores viales y cuatro puentes inferiores peatonales.
Aunado a lo anterior, agregó que en el caso del tramo de “San Marcos” se edificó un puente de 850 metros de largo y un pilar de 225 metros, el segundo más alto del mundo. Se instalaron 16 paneles de mensajes, más de 140 cámaras de circuito cerrado, 40 teléfonos de auxilio, cinco estaciones meteorológicas, entre otras adecuaciones.
Finalmente, los mandatarios coincidieron en que el Corredor México-Tuxpan hará de la República un país más competitivo y detonará el desarrollo de Puebla, Veracruz, Hidalgo, Estado de México y el Distrito Federal.