Ante la muerte de una persona por influenza AH1N1 y los doce casos que se reportaron en Puebla, el gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas, aseguró que si bien el estado no representa un foco rojo se prevé que los casos puedan aumentar, por eso pidió a la población, en general, que acuda al médico ante el menor síntoma, si están enfermos no saludar de mano o beso y lavarse de manera constante las manos.
Señaló que están en perfecta coordinación con el gobierno de la República para atender a la gente, aunque recomendó que las personas que están en situación vulnerable, como los adultos mayores, los niños menores de cinco años, las mujeres embarazadas o quienes padezcan diabetes, se vacunen contra el virus.
El mandatario, dijo que al momento se tendría un abasto del 100 por ciento en todos los centros de salud y hospitales que dependen del estado, aunque buscarían reforzar más las medidas preventivas solicitando a los ciudadanos que se atiendan en su clínica más cercana si presentan alguna sintomatología.
“Si bien Puebla no es un estado que sea foco rojo, en términos de muchos casos, sí es previsible que por la época del año pueda crecer el número de reportes”, sentenció Moreno Valle Rosas, pues tan sólo del martes para el miércoles aumentaron de nueve a doce los casos.
De acuerdo con la Dirección General de Epidemiología, de la Secretaría de Salud federal, en Puebla se contabilizan 12 casos por influenza y una defunción, de ellos, la gran mayoría (once) se presentó en clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y uno en los centros de salud de la dependencia.
Ayer el reporte indicaba que eran nueve los enfermos de AH1N1 en la entidad, por lo cual la tasa de crecimiento del virus es de 30 por ciento hasta el momento, aunque tampoco es una situación grave en comparación con otros estados, como Jalisco, que tiene 356 casos y 37 muertes, o San Luis Potosí, con 284 reportes y 17 decesos.