La mexicana Fátima Bosch, coronada como Miss Universo 2025, denunció una fuerte ola de amenazas, insultos y mensajes de odio recibidos después de su triunfo. Las agresiones surgieron en medio de las acusaciones de supuesto fraude hechas por exjurados del certamen, señalamientos que ella rechaza y que la organización ha calificado como infundados.
A través de sus redes sociales, Bosch publicó capturas de pantalla donde se leen mensajes que le exigen devolver la corona, la acusan de “ganar por fraude” e incluso le desean la muerte. Entre los textos compartidos se incluyen frases como: “Espero que te mueras mañana” y “Nunca encontrarás la felicidad, fraude”.
La modelo, originaria de Tabasco, afirmó que estos ataques no la intimidarán: “No voy a retroceder, no voy a esconderme y no voy a pedir permiso para brillar”. Destacó que detrás de las agresiones digitales existe un problema global de violencia contra las mujeres que no debe normalizarse.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer (25N), la Miss Universo dijo que decidió alzar la voz no solo como figura pública, sino como mujer. “La violencia no siempre aparece en forma de golpes; también está en palabras, burlas y odio digital”, expresó. Aseguró que su propósito será usar su plataforma para visibilizar estas agresiones: “Mi voz no se apaga”.
Bosch también respondió a quienes han cuestionado su triunfo. El exjuez Omar Harfouch afirmó que la corona fue resultado de un conflicto de interés relacionado con el empresario Raúl Rocha, copropietario de Miss Universo. No obstante, Rocha negó rotundamente las acusaciones, defendió la legalidad del certamen y anunció acciones legales contra quienes difundan información falsa.
Fátima Bosch agradeció el apoyo de quienes la respaldan y reiteró su compromiso con causas sociales: “Cuando una mujer alza la voz, alzamos la voz todas. Mi victoria no es una amenaza; es un recordatorio de que somos resilientes y poderosas”.




