El legendario actor Armando Silvestre, una figura emblemática de la Época de Oro del Cine Mexicano, falleció a los 98 años en San Diego, California. La noticia fue confirmada por el periodista Álex Kaffie a través de su cuenta de Instagram, destacando su extensa carrera cinematográfica que abarcó 205 películas, algunas de ellas producciones norteamericanas.
Silvestre nació en San Diego pero se crió en Tijuana, inició su carrera en 1947 con la película “La Casa Colorada”. Desde entonces, se consolidó como uno de los actores más prolíficos y versátiles del cine mexicano. Su carrera incluyó notables participaciones en cintas como “La red” dirigida por Emilio ‘Indio’ Fernández y “Ahí viene Martín Corona” junto a Pedro Infante.
A lo largo de su carrera, Silvestre trabajó tanto en México como en Estados Unidos, donde llegó a ser actor exclusivo de los estudios Universal. Su talento lo llevó a compartir escena con grandes figuras como Clint Eastwood en “Dos mulas y una mujer” y Anthony Quinn en “Los hijos de Sánchez”. También hizo apariciones en series estadounidenses como “La Mujer Maravilla” y “FBI”.
El exilio de Armando Silvestre de México
Pese a su éxito, Silvestre enfrentó momentos difíciles, incluyendo un exilio forzado por el entonces presidente mexicano Miguel Alemán Valdés. Se especula que este incidente se originó debido a un coqueteo entre Silvestre y la actriz Linda Christian, quien también atraía la atención del presidente.
Según relata Silvestre, fue obligado a abandonar México tras recibir amenazas de los guardaespaldas de Alemán Valdés. Durante su exilio en Estados Unidos, Silvestre continuó su carrera cinematográfica, participando en películas como “Wyoming Mail” y “Apache Drums”.
El actor pasó sus últimos años en San Diego, donde administraba su propio negocio. Su partida deja un vacío en el mundo del espectáculo, pero su legado y sus películas continúan siendo un testimonio de su talento y dedicación al arte cinematográfico.