Nicola Porcella vivió su segunda gala de eliminación en “La Casa de los Famosos” y logró salvarse gracias a los votos del público junto a Sergio Mayer con quien mantuvo una íntima charla donde explicó la razón detrás del consumo de píldoras y algo que también de forma indirecta daría razones de sus conductas explosivas, siendo su pelea con Wendy Guevara el ejemplo más reciente de ello y que incluso actualmente lo tiene con la mano inmovilizada pues golpeó de forma extrema una de las puertas de las habitaciones.
El ex futbolista confesó que años atrás fue diagnosticado con un trastorno que se ha hecho evidente durante su participación en el programa. Y es que en varias ocasiones se le ha visto consumir píldoras, lo que llevó a suponer a sus fans que padece depresión. No obstante, se trata del Trastorno Límite de Personalidad (TLP) o “borderline”.
De acuerdo con el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría, el TLP se clasifica dentro del grupo de los trastornos de la personalidad y se caracteriza por patrones de inestabilidad emocional, relaciones interpersonales tumultuosas y una autoimagen fluctuante.
¿Cómo saber si una persona padece TLP?
El DSM-5 establece que para recibir un diagnóstico de TLP, una persona debe experimentar cinco o más de los siguientes síntomas de manera persistente e intensa:
- Miedo al abandono real o percibido
- Relaciones intensas e inestables con familiares, amigos y otros seres queridos
- Percepción de la autoimagen o sentido de identidad distorsionado e inestable
- Comportamientos impulsivos, por ejemplo, comer, comprar cosas, sexo, entre otras
- Comportamiento autodestructivo
- Estados de ánimo intensos y variables
- Sentimiento de vacío
- Problemas para controlar la ira
- Disociación
Vale la pena mencionar que no todas las personas con TLP experimentan todos los síntomas. La gravedad, la frecuencia y duración dependen del paciente.
El tratamiento para el TLP puede variar según las necesidades individuales, pero suele incluir terapia psicológica, como la Terapia Dialéctico Conductual (DBT), que ha demostrado ser eficaz para ayudar a las personas a desarrollar habilidades de regulación emocional y mejorar las relaciones interpersonales.
Sin embargo, la expresión de ira excesiva, la impulsividad y los cambios de humor frecuentes pueden alejar a las personas cercanas, a pesar de que se desee mantener relaciones afectivas y duraderas. Por lo general, el trastorno límite de la personalidad comienza en la edad adulta temprana y tiende a ser más severo durante esa etapa, aunque puede mejorar con el tiempo.
¿Qué causa el trastorno?
El TLP deriva de factores genéticos, ambientales y sociales que aumentan el riesgo de desarrollarlo, además, se puede cruzar con otros padecimientos, como la ansiedad, estrés postraumático, depresión, bipolaridad o trastornos de la alimentación.