El músico argentino Gustavo Cerati cumple 55 años; todavía sigue en coma tras el accidente cerebrovascular que sufrió en 2010 y que tiene a los fans del exlíder de Soda Stereo ansiando su pronta recuperación.
“Supongo que tienen sed”, dijo Cerati mientras miraba con malicia al público de Buenos Aires, como si se tuviera que contener para no comerse el escenario a bocados. Era el 20 de septiembre de 1997, y Soda Stereo, el grupo que lideraba, decía adiós a sus fans, aunque volvería fugazmente 10 años más tarde. Bajaba el telón así una de las bandas más importantes de Argentina y del rock en castellano y, al mismo tiempo, el talento de Cerati cobraba entonces un nuevo impulso en su carrera como solista.
Pero la luz se apagó el 15 de mayo de 2010. Tras un concierto en Caracas, Cerati sufrió un accidente cerebrovascular que lo dejó en coma. “Son cuatro años de cama, él está muy bien. Si Gustavo sufriera, sería insoportable, pero él realmente está como dormido”, contaba su madre Lilian Clark el pasado mayo a la emisora Rock and Pop.
A su estabilidad clínica se aferran con fe los numerosos fans del cantante de pelo rizado y con voz que “nos advierte la verdad”, según el poema que le dedicó otro mito del rock argentino como Luis Alberto Spinetta. La esperanza de que se recupere sigue intacta.
Pasión por Soda
Hace tres décadas, un grupo formado por el bajista Héctor Zeta Bosio, el batería Charly Alberti y el cantante y guitarrista Gustavo Cerati lanzaba su primer disco. Era un 14 de diciembre de 1984, y ese LP homónimo sólo era el primer paso para construir la pasión por Soda Stereo.
Porque el grupo liderado por Cerati fue toda una sensación no sólo en Argentina sino en toda Latinoamérica. Su estilo cercano al post-punk y la “new-wave” e influido por la música anglosajona ensanchó la veta siempre creativa del rock argentino comandado por artistas como Charly García o el mencionado Spinetta.
Abrazado a las sinuosas letras de Cerati, Soda Stereo desprendía un aire de modernidad, de estilo personal, de elegancia. Temas como “Canción animal”, “En la ciudad de la furia” o “De música ligera” llevaron a Soda Stereo de gira por países como México, Venezuela, Chile o Colombia.
El “sueño stereo” terminó en 1997, cuando un texto de Cerati titulado “La carta del adiós” anunciaba la separación del grupo.
Desavenencias personales y musicales ponían punto y final a siete discos de estudio como a Soda Stereo, antes de que Cerati continuara con sus proyectos en solitario que ya había iniciado en 1993 con su primer LP “Amor amarillo”.
Solo Cerati
“La verdad es que no siento que soy todo lo abierto que debería ser; siento que mi mejor disco todavía no lo he hecho y en esa búsqueda trato de no ponerme zanahorias muy lejanas”. Así de inconformista pero sensato se expresaba Cerati en 2006, en medio de la gira de promoción de su cuarto disco sin acompañantes.
Abierto siempre a nuevos desafíos, la trayectoria en solitario del músico se caracterizó por la experimentación. El artista desplegó toda su creatividad a lo largo de cinco álbumes.
Pero la “sodamanía” quería más, y el grupo se reunió finalmente en 2007, para celebrar 10 años de su último concierto. Cerati dijo que era “buen momento” para volver a tocar juntos, incluido que a él le gustaría que sus “hijos vieran a Soda Stereo alguna vez”.
La gira fue un éxito enorme. Después, Cerati todavía publicó en 2009 el disco “Fuerza natural”, en cuya gira de presentación sufrió el trágico accidente.
A la espera
Sus seguidores continúan en vela, esperando su recuperación y demostrándole su cariño. Recientemente, fue nombrado Ciudadano Ilustre de Buenos Aires, el máximo reconocimiento que otorga la capital argentina. Han pasado más de cuatro años desde su accidente, pero nadie olvida a Cerati, tampoco en Chile, donde 26 músicos preparan un álbum tributo que llevará por título una frase que más bien parece un deseo: “Me verás volver”.
AFE