La Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) anunció el reforzamiento de medidas sanitarias preventivas en sus instalaciones, tras la confirmación del primer caso en México de influenza virus A H3N2, subclado K, de acuerdo con una tarjeta informativa emitida por la Secretaría de Salud federal el pasado 12 de diciembre de 2025.
Mediante un comunicado oficial, la Comisión Institucional para la Prevención y Seguimiento de Enfermedades Infectocontagiosas informó que la decisión se sustenta en el principio de preservar la vida y la salud de la comunidad universitaria, así como en los acuerdos aprobados por el Consejo Universitario. La institución advirtió que esta variante ha provocado un incremento en hospitalizaciones y mortalidad en otros países, particularmente entre infantes, adultos mayores, mujeres embarazadas y personas con enfermedades crónicas.
Entre las acciones implementadas, la BUAP estableció el uso obligatorio de cubrebocas en todas las áreas del Hospital Universitario de Puebla, las Clínicas de Medicina Familiar y la Clínica Integral del Adulto Mayor (CIAM). Además, determinó el uso permanente y adecuado de cubrebocas para personas con síntomas respiratorios dentro de las instalaciones universitarias, así como la aplicación obligatoria de gel antibacterial en los accesos a estas unidades de salud.
La universidad también exhortó a estudiantes, personal académico, administrativo y visitantes a reforzar las medidas de prevención incluidas en el Decálogo institucional, entre ellas la higiene frecuente de manos y el uso de gel con alcohol. De manera especial, recomendó acudir a vacunarse contra la influenza a quienes aún no lo han hecho en la presente temporada, con énfasis en los grupos de mayor riesgo: personas mayores de 60 años, niñas y niños, mujeres embarazadas, pacientes con padecimientos crónicos y personal de salud universitario.
La Secretaría de Salud federal ha señalado que, aunque se trata de un primer caso confirmado en el país, el subclado K del virus de influenza A H3N2 ha mostrado en otras regiones del mundo una mayor capacidad de generar cuadros graves. En ese contexto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha recomendado fortalecer la vigilancia epidemiológica, mantener medidas básicas de prevención y priorizar la vacunación estacional durante la temporada invernal.
La BUAP subrayó que la prevención depende de la corresponsabilidad colectiva y llamó a su comunidad a no bajar la guardia ante la presencia de síntomas respiratorios. “Entre todas y todos podemos contribuir a reducir el riesgo de transmisión y evitar casos graves”, señaló la institución, al tiempo que informó que se mantendrá atenta a la evolución de la situación epidemiológica y a las disposiciones que emitan las autoridades sanitarias, sin descartar la actualización de medidas conforme sea necesario.




