En el marco del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, la IBERO Puebla conectó con seis importantes científicas e ingenieras para compartir sus experiencias profesionales. Las expertas brindaron sus testimonios de superación y trabajo arduo con el que han marcado significativamente el rumbo de sus respectivos espacios laborales.
La efeméride, que se conmemora cada 11 de febrero, comenzó como iniciativa de la UNESCO y ONU Mujeres para remarcar el rol preponderante que tienen las mujeres y las niñas en espacios que, tradicionalmente, habían sido ocupados por varones.
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El panel virtual contó con especialistas de diversos rubros. Desde mujeres jóvenes desempeñándose en empresas extranjeras de alto reconocimiento internacional, como la ingeniera en mecatrónica María Fernanda López Salinas, hasta la ingeniera biomédica Adriana Velázquez Berumen, quien cuenta con más de 20 años de carrera y hoy es parte del personal de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Me encanta motivar a otras mujeres y niñas que quieran estudiar ciencias y tecnologías”, Adriana Berume.
Para Adriana Velázquez, es una motivación constante el poder inspirar a otras mujeres fusionando su interés por la mecánica y la tecnología con el campo médico. Desde su experiencia trabajando en el ISSSTE hasta su actual posición en la Organización Mundial de la Salud, ha liderado innovadoras iniciativas para seleccionar e implementar tecnologías médicas que beneficien a comunidades vulnerables en todo el mundo.
En sus palabras, “no es la tecnología lo más importante, sino lo que está detrás de ella, que siempre son los pacientes”. Su compromiso con la equidad y la calidad en la atención médica resuena en su trabajo diario y en su apoyo a las futuras generaciones de mujeres en el campo de la ingeniería biomédica.
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Esa misma pasión por el rubro médico lo comparte la Bianey Palma Fernández, quien compartió su fascinante travesía por la física experimental que la llevó hasta su actual trabajo en el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea. La experta ha realizado investigaciones en áreas como la imagenología diagnóstica y la radioterapia.
“La física médica busca mejorar los tratamientos y la protección de pacientes y profesionales”, afirmó.
La científica enfatizó la importancia de las mujeres en la física y expresó su deseo de ver un mayor crecimiento en su representación.
“Ojalá y poco a poco se consiga”, comentó con esperanza. Con ese mismo anhelo, Magdalena Ortiz de la Fuente, matemática e investigadora de la Universidad de Viena, compartió su apasionante travesía a través de la ingeniería en sistemas, remarcó las diversas dichas que le ha traído su profesión.
“La ciencia es sumamente internacional y abre muchísimos horizontes”.
Hoy en día, dedica gran parte de su tiempo a la investigación teórica, colaborando con talentosos estudiantes en la resolución de problemas complejos.
“Mi vida diaria consiste en pasar varias horas pensando cómo podemos resolver problemas de la manera más eficiente posible”, explicó.
La gestión de problemáticas también está presente en la cotidianidad de María Fernanda López Salinas, ingeniera mecánica que ha colaborado con organizaciones japonesas en la investigación de robots humanoides, así como en proyectos de sistemas de control para celdas de hidrógeno en Canadá. Desde Baltimore, Estados Unidos, aseguró que “la mecatrónica te permite combinar el mundo físico con el digital, creando dispositivos inteligentes y automatizados.”
Otra de las científicas invitadas fue la bióloga Abisai Pazos Rojas, quien remarcó las oportunidades que le brindaron las becas de investigación.
“Mis estudios me permitieron realizar estancias predoctorales en Brasil y España, donde tuve la oportunidad de trabajar con destacados científicos”.
Su trabajo se ha centrado en comprender los mecanismos moleculares, ofreciendo perspectivas prometedoras para el desarrollo de productos biotecnológicos eficaces y respetuosos con el medioambiente.
Finalmente, la ingeniera en Biotecnología, Andrea Gómez Fernández, compartió la gran versatilidad de su campo. Actualmente, como líder de Investigación y Desarrollo en una empresa de confitería, aplica sus conocimientos en bioquímica e ingeniería para desarrollar nuevos productos y colaborar con clientes internacionales como Bimbo y Hershey’s, destacando la importancia de la investigación continua en su labor.
