La SEP tomará medidas en caso que los docentes pertenecientes o afines a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) traten de impedir la realización del Censo de Escuelas, Alumnos y Maestros de Educación Básica y Especial, mismo que se llevará a cabo del 26 de septiembre al 29 de noviembre en todo el país, compartió el titular de la dependencia, Alberto Lozoya Legorreta.
En el marco de la presentación ayer del padrón organizado por la Secretaría de Educación Pública federal y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la CNTE lo rechazó e, incluso, amenazó con boicotearlo en los estados donde tiene influencia, como medida contra la reforma educativa y sus leyes secundarias.
En ese sentido, Lozoya Legorreta, sostuvo que en Puebla la CNTE no tiene la misma autoridad que en otros estados, por lo cual, la posibilidad que impida el registro es mínima, pero en caso que llegara a ocurrir estará dispuesto “a tomar las medidas necesarias”, aunque no quiso detallar si éstas serán suspensiones, descuentos, cambios de adscripción o despidos.
Sobre éste se dijo durante el evento que tendrá un costo de 22 millones de pesos para aplicarse en Puebla a los más de 13,697 centros de trabajo, a los 81 mil docentes y a los más de un millón, 380 mil estudiantes.
Cabe destacar que el análisis, ejecutado por 866 trabajadores del INEGI, consta de 313 preguntas que contestarán los profesores, los empleados de apoyo, los padres y los jóvenes de las escuelas básicas y especiales. Además, se georreferenciarán las unidades y se tomarán de seis a diez imágenes de las mismas.
De acuerdo con el director Regional Oriente del INEGI, Jorge Valdovinos Espinosa, los resultados preliminares del censo se tendrán para el 16 de diciembre y los definitivos estarán para el primer trimestre de 2014, con el cual se elaborará, también, un atlas de las instituciones y sus medios ambientes.