La cultura occidental se ha regido por el lenguaje racional, el cual es preciso y exacto, sin embargo al emplearlo en las relaciones humanas, provoca daños y discusiones interminables, porque la razón siempre quiere dominar la vida, declaró el doctor Ricardo Peter Silva, investigador de la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP.
En el Seminario Filosófico Semestral con la temática: Lenguaje y cultura, que realiza esta unidad académica, indicó que el lenguaje es producido por el sistema mental, donde existen dos descodificadores o procesadores de los estímulos que se reciben: el racional y el emocional, el primero produce ideas y el segundo sentidos.
“El racional es objetivo y se enfoca a la solución de problemas, pero por otro lado desecha todo lo que es imperfecto en la vida; en cambio el emocional se rige por el sentimiento, ocasionando más problemas en lugar de solucionarlos”.
Ambos, agregó, generan lenguajes: lenguaje racional y de límite (emocional) con una función terapéutica en la vida. La función del segundo es recuperar todo lo que el procesador racional desecha: la existencia misma; su herramienta es la paradoja y produce la aceptación de las circunstancias, estando principalmente presente en la literatura; mientras que el lenguaje racional se aprecia en las ciencias.
En su intervención María del Carmen García Aguilar, investigadora de la Facultad, dijo que durante siglos la voz de las mujeres había permanecido en el anonimato, pero ahora han conquistado todos los campos del saber, incluida la escritura, “ésta intenta mostrar la visión de la mujer, tiende a los recuerdos y remembranza”.
Por lo general está en primera persona, hace uso de la memoria con un lenguaje interior, las autoras escogen a sus personajes por ser rechazados en la vida real, abordando el problema de la auto reflexión, manifestando el significado de ser mujer.
Expuso que la escritura femenina presenta un cambio de valores jerarquizados, además de cambiar el estereotipo de ser mujer, presentando a las féminas con mayor libertad y cierta rebeldía.
La también Directora del Centro de Estudios de Género, explicó que “las mujeres no intentan parecerse a las hombres, sino crear un lenguaje propio a través de la escritura, que aporta una nueva forma de ver el mundo”.
Por su parte Juan Manuel Campos Benítez, académico de la FFyL, mencionó que este durante el Seminario Filosófico se presentará las líneas de investigación que realizan algunos de los docentes; así como conocer el uso real de la lengua.
