Fauja Singh, conocido mundialmente como el “Tornado con turbante”, falleció a los 114 años en su aldea natal en el estado de Punjab, India, tras ser atropellado por un vehículo mientras daba su habitual paseo. A pesar de haber sido trasladado con urgencia al hospital, las heridas que sufrió en la cabeza resultaron fatales. La tragedia ocurrió cerca de la ciudad de Beas y ha generado conmoción tanto en la India como en el mundo del atletismo.
Pero la historia de Singh no es solo una sobre longevidad, sino sobre superación, fe y un espíritu que jamás se rindió. Este exgranjero, que no aprendió a caminar bien hasta los 10 años y jamás asistió a la escuela, encontró en el atletismo una forma de sanar su alma rota tras la muerte de su hijo en 1994. En el año 2000, con 89 años, y tras haber emigrado al Reino Unido, comenzó a correr. Y no paró durante más de una década.
En su debut en el Maratón de Londres, sorprendió al mundo al completar la carrera en 6 horas y 54 minutos. No era solo un hombre mayor corriendo, era un símbolo de resistencia. Fue en octubre de 2011 cuando alcanzó la cima de su leyenda: con 100 años, Fauja Singh cruzó la meta del Maratón de Toronto en 8 horas, 25 minutos y 16 segundos. Aunque el Libro Guinness de los Récords no reconoció oficialmente la hazaña por la falta de un certificado de nacimiento, su pasaporte, y una carta personal de la Reina Isabel II felicitándolo por su centenario, avalan su edad.
“El día que deje de correr será el día en que muera”, había dicho Singh en una ocasión. Aunque ya no competía, sus caminatas diarias seguían siendo parte de su rutina. Y fue precisamente en una de ellas donde su vida se apagó.
Su entrenador, Harmander Singh, lo resumió con emotiva precisión: “correr le dio un nuevo enfoque en la vida, hizo que valiera la pena vivirla”. Su historia no solo tocó al mundo del deporte, también al cultural y social: protagonizó campañas globales para marcas como Adidas y PETA, apareció junto a figuras como David Beckham y fue portador de la antorcha olímpica en 2004 y 2012.
Singh también utilizó su fama para el bien: donaba todo lo que ganaba a obras de caridad. Su última carrera oficial fue un 10K en Hong Kong en 2013, a los 101 años, donde terminó en una hora y 32 minutos.
El primer ministro de la India, Narendra Modi, expresó su pesar en redes sociales: “Fue un atleta excepcional con una determinación increíble. Inspiró a la juventud de la India”. Su biógrafo, Khushwant Singh, escribió: “Mi tornado con turbante ya no está… descansa en paz, mi querido Fauja”.
Nacido el 1 de abril de 1911, en una familia campesina, Fauja Singh vivió dos guerras mundiales, la independencia de India, y el siglo del cambio. Pero quizás su mayor contribución fue demostrar que nunca es tarde para empezar, ni para dejar huella.
En un mundo donde la juventud es vista como el pináculo del rendimiento, Fauja Singh corrió –literalmente– en la dirección contraria, mostrando que la edad es solo un número cuando el corazón aún tiene caminos por recorrer.