El Tricolor femenil comenzó con el pie izquierdo su participación en los Juegos Panamericanos de Toronto, tras caer 1-0 con Colombia en duelo disputado en el estadio Tim Hortons Field.
En partido correspondiente al Grupo A del certamen, la solitaria anotación del encuentro fue obra de Catalina Usme en el minuto 65 con el que selló el dominio que su escuadra ejerció a lo largo del cotejo.
De esta manera, la escuadra sudamericana encabeza el sector por el momento con tres unidades, mientras que el once mexicano está rezagado en esta primera fase sin unidades y su próximo partido será ante Argentina el martes.
Fue un partido igual de cerrado como los que han tenido en sus enfrentamientos anteriores, con cierto dominio del equipo cafetalero, que asfixió al cuadro bajo mexicano que como pudo se defendió a lo largo del primer lapso.
Sin embargo, el conjunto dirigido por Leonardo Cuéllar tuvo algunos destellos para ir al frente en busca del partido pero la marcación de las colombianas fue acertado y les quitaron la pelota.
Fue muy poca la idea que mostró el conjunto azteca para llegar con peligro sobre la meta de la arquera colombiana Sandra Sepúlveda, quien contuvo sin mayores problemas los embates del rival.
Con ese accionar de ambos equipos se llevó el primer lapso del partido sin que las cafetaleras pudieran hacer efectivo el dominio que por momentos tuvo, y unas mexicanas que no pudieron asentarse en el partido.
Para la segunda parte, la jugadora María Santos fue un dolor de cabeza para la zaga mexicana, que como pudo intentó detener sus arribos y sus centros que pudieran causarles daño en su portería.
Sin embargo, nada pudieron hacer para evitar que por derecha Diana Ospina ingresara a velocidad y sacara centro al corazón del área mexicana donde Kenti Robles no pudo despejar y deja el balón a modo para que Usme hiciera el 1-0 en el minuto 65.
Aunque el representativo femenil azteca se fue al frente por la igualada, le faltó idea para llegar con jugada elaborada y al frente se notó la ausencia de Charlyn Corral, mientras que las rivales colombianas trataron de aprovechar los espacios.
En ese intento de lograr el 1-1, se veía más factible que Colombia ampliara el marcador que México la igualada pero para su fortuna las cafetaleras ya mostraban cansancio, lo que les impidió ser contundentes.
