Aún no se sabe si el piloto español Fernando Alonso participará en el Gran Premio de Australia, primera fecha de la temporada 2015 de Fórmula 1, ya que todavía se encuentra en recuperación del accidente que sufrió en el circuito de Montmeló, en Cataluña, el pasado 22 de febrero.
Aunque el asturiano dos veces campeón del mundo ha dicho sentirse “perfectamente bien”, el jefe de McLaren, Ron Dennis, señaló que prefieren esperar para conocer el estado final del conductor, que pasó tres días en el hospital después del accidente.
“Yo no puedo pensar en ninguna razón para un no, pero no soy el doctor”, explicó Dennis durante una rueda de prensa en Montmeló. Agregó que Alonso “está completamente lúcido, habla, quiere manejar, quiere ir a las pruebas, pero los doctores le dijeron que si deseaba estar al 100 por ciento y correr en Australia, la mejor opción era descansar”.
El dueño de la escudería descartó los rumores de que el choque en Montmeló fuera por una descarga eléctrica en el coche debido a un fallo de la unidad de poder de Honda.
“Hubo rumores de eso. Cuando un ser humano es electrocutado hay una enzima en su cuerpo que se eleva en su cuerpo y permanece por 48 horas, esa enzima no se encontró”, dijo. Al parecer, el accidente fue producto de una fuerte ráfaga de viento, hipótesis que es reforzada por un video de un aficionado.
La Federación Internacional de Automovilismo ordenó la investigación del accidente para determinar las causas. “La FIA está interesada en revisar la posición del casco en relación a la estructura. Queremos compartir todo lo posible para satisfacerlos en que estamos siendo cuidadosos con el tema”, señaló el organismo rector del automovilismo.