El Vicente Calderón decidirá el campeón de la Supercopa de España el viernes, tras un empate en una nueva exposición de dos formas distintas de interpretar el futbol, entre un Real Madrid reactivado por Di María y un Atlético de Madrid al que levantó de la lona Raúl García a dos minutos del final (1-1).
La dureza rojiblanca de la Final de la Champions marcó el inicio. Amarillas tempraneras a Koke y Siqueira que condicionaban. El Atlético defendía bien, se movía como un acordeón para cerrar espacios. Conseguía borrar del campo en el primer acto a Cristiano Ronaldo, frenar la velocidad de Bale mientras el Real Madrid añoraba la figura de un último pasador como Isco. Un jugador que desequilibrara entre líneas tan ordenadas.
ASÍ LO VIVIMOS: MINUTO A MINUTO
Hasta Mandzukic sacaba balones como un defensa más. El nueve robaba en banda a Modric, despejaba todo los córners y cuando recibía un balón en su zona, que pisó poco para desgracia rojiblanca. Era el minuto 13 cuando tras un intento desviado de Bale, Casillas respondía al disparo centrado del croata.
De golpe apareció el Atlético en terreno rival. En Lisboa lo hizo por un error de Casillas, hoy perdonó uno del salvador aquel día del capitán blanco, Sergio Ramos. Controló mal con el pecho siendo último hombre y dejó el esférico a Saúl con campo por delante. Su disparo abajo cruzado no tuvo dificultad para Iker.
Las luces de alarma se encendieron en el Bernabéu cuando Cristiano Ronaldo no apareció en la reanudación. James ocupó su sitio en el campo y el Real Madrid buscó un líder. Apareció Bale para disparar por primera vez a portería rival a los 47 minutos. Su latigazo escorado lo repelió Moyá.
Entre errores de pretemporada y nerviosismo, apareció la polémica que nunca falta en un derbi. Un golpe en el salto de Mandzukic a Ramos que respondió el andaluz con un golpe en la cara. El colegiado resolvió con dos amarillas cuando ambos pudieron irse a los vestuarios.
Rondaba el gol el Real Madrid, con un testarazo de Ramos y una falta que rompió Bale y perdonó Kroos. Justo dos minutos después de que ingresó Raúl Jiménez del lado colchonero, al 78′, la escuadra blanca consiguió el gol gracias a que James aprovechó un rebote del guardameta.
Al Real Madrid lo había reactivado la entrada en escena de Ángel di María, a quien el público demostró que no quiere su salida. Encaró siempre y subió los niveles de peligro.
Pero el tanto obligó a adelantar líneas al Atlético de Madrid que acabó encontrando el premio. Iker sacó una mano a Griezmann, antes de quedarse de hielo al ver como un saque de esquina de Koke pasaba entre las cabezas de Carvajal y Marcelo, y el más listo de la clase, Raúl García, marcaba a placer.