El gran ganador de la elección interna del PAN de este domingo fue Eduardo Rivera Pérez.
El excandidato a gobernador quedó debilitado después de la derrota del pasado 2 de junio, pero supo reorganizar a su equipo, mantuvo la calma y tomó una nueva ruta que lo llevó a formar parte de la planilla de Jorge Romero para ganar la dirigencia nacional.
El virtual triunfo de Jorge Romero le dará la fuerza política suficiente a Eduardo Rivera para ganar la próxima elección del PAN en Puebla, a través de Felipe Velázquez.
Un dato más.
La elección del próximo líder estatal del PAN será a través de consejeros y ahí el grupo de Eduardo Rivera tiene mayoría para retener el control de la dirigencia.
Por donde se le vea, los opositores a Lalo Rivera no pudieron aprovechar la estrepitosa derrota del pasado 2 de junio para arrebatarle el control del partido.
Hoy el panorama luce distinto para Lalo Rivera y su equipo, que han sido pacientes, no entraron a la confrontación política con Pepe Chedraui por el tan mencionado hoyo financiero por 680 millones de pesos.
Que por cierto, ayer el exalcalde Adán Domínguez aclaró que no existe tal hoyo financiero y todo se trata de una persecución política contra el grupo de Lalo Rivera.
En resumidas cuentas, Lalo Rivera y su equipo se reagruparon, aguantaron la embestida, ya ganaron la elección nacional, van por la elección de la dirigencia estatal y se pondrán a trabajar de inmediato para buscar la revancha política en las elecciones del 2027.
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