Bien dicen que la vida siempre concede revancha si se es paciente, constante e inteligente.
Y así es, también, cuando Dios concede justicia.
Sobre todo si la iniquidad hizo presa a alguien inocente, como regularmente sucede mucho en la política.
Es el caso de Israel Pacheco Velázquez, ex líder sindical del Ayuntamiento de Puebla, quien como ya lo dijo el gobernador Alejandro Armenta Mier, fue un perseguido político del viejo régimen.
Porque hay que reconocer que Israel es un operador nato que sirvió al poder y a un grupo que lo utilizó y abandonó a su suerte cuando sus intereses decidieron que había que desecharlo, eliminarlo y hasta encarcelarlo.
Fue muy claro el gobernador Armenta, cuando certificó la inocencia de Israel, quien tuvo que sufrir la cárcel –casi 5 años– y un calvario que no le correspondía a él sino a otros, a quienes verdaderamente cometieron las fechorías por las que se le acusó.
Por eso la importancia de las palabras del mandatario, quien sostuvo en la conferencia mañanera de ayer: “yo estoy en contra de que el poder se utilice para perseguir a las personas”.
Y por eso mismo se entienden dos cosas: la primera, por qué el gobernador poblano califica a Israel Pacheco como “un hombre trabajador y eficiente”, y quien será el coordinador estatal del Programa de Mantenimiento Permanente.
Y la segunda, que tiene que ver con la justicia, por qué a la fecha los presos políticos barbosistas ya, todos, actualmente están en libertad. Incluido uno de los responsables de haber encarcelado a Israel, Eukid Castañón Herrera.
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Tal es la importancia y el peso del nombramiento de Israel Pacheco, ahora que su cargo y quehacer dependerán directamente de la oficina de su gran amigo Alejandro Armenta, ni más ni menos.
Porque la amistad y los lazos de respeto, afecto y lealtad del ex líder sindical para con el Ejecutivo solo se están refrendando, ya que el gobernador es uno de los dos personajes que lo ayudaron en el infierno al que fue sometido injustamente por el morenovallismo, grupo por el que estuvo preso.
El segundo benefactor y apoyo de Pacheco es un personaje de todos conocido en el ámbito político y universitario, quien se la jugó por y con Israel durante su encierro, Damián Hernández Méndez, otro de sus grandes amigos, quien nunca lo abandonó, ni a él ni a su familia.
Cosas de la vida, porque en su momento a ambos, tanto a Alejandro como a Damián, la vida los puso en predicamento y con justicia, pero sobre todo la ayuda de Dios, volvieron a donde los sacaron, de donde los echaron y fueron expulsados injustamente, por no haberse sometido ni arrodillado ante el poder.
Empero, insisto, Pacheco Velázquez esta de regreso, viene por la revancha y está decidido a apoyar sin miramientos la administración de Alejandro Armenta.
Es evidente, además, que vuelve por la puerta grande, ya que además de haberse convertido en parte del equipo armentista el pasado 15 de noviembre de 2024 firmó su reinstalación como trabajador del Ayuntamiento de Puebla.
De sobra está decir que la inocencia de Pacheco permitió su libertad, pues ya había sido sentenciado injustamente por ocho años más, además de los cuatro que ya había purgado, por falsos delitos creados desde la Fiscalía General del Estado de Puebla, los cuales, al final, fueron desechados.
Israel Pacheco goza de cabal salud y está más vivo que nunca.
Políticamente está entero, renovado, con madurez, con ganas de limpiar su nombre y de recobrar la credibilidad que le dejó la defensa de los trabajadores del municipio más importante del estado.
Por cierto, que nadie se equivoque, pues no existe la menor intención de armar un complot en la ciudad por su parte, ya que él siempre ha gozado de la simpatía de los trabajadores municipales.
Mucho menos tiene en mente afectar los intereses y el trabajo del presidente municipal, José Chedraui Budib, a quien respeta y a quien reconoce su trabajo.
Los que se tienen que cuidar y preocupar, más bien, son aquellos que han hecho del Sindicato Único de Empleados y Trabajadores del Honorable Ayuntamiento de Puebla, Instituciones Paramunicipales y Organismos Públicos Descentralizados Licenciado “Benito Juárez García” (Suethapipopd) un botín y un arca personal, como el actual secretario general del gremio, Gonzalo Juárez Méndez.
Sobre todo porque los excesos de Gonzalitos rayan en lo burdo y en el descaro. De hecho, el lidercillo hizo todo lo posible para evitar el regreso y la reinstalación de Israel Pacheco, tal como lo revelé desde el año pasado en este mismo espacio.
A propósito, nadie ha olvidado que Juárez Méndez se la jugó directamente con Ignacio Mier Velazco, actual senador y quien perdió ante el actual gobernador electo de Puebla, Alejandro Armenta, la candidatura de Morena.
Gonzalitos, entre otras pillerías, utilizó los recursos del sindicato que representa para financiar las aspiraciones de Nacho y de Eduardo Rivera Pérez, ex candidato perdedor del PAN al gobierno del estado.
Sin embargo, ahora sí, a Gonzalitos ya no hay nada ni nadie, tal vez algunos reductos agazapados en distintas áreas del Ayuntamiento capitalino, que lo apoye ni lo sostenga. Su corrupción solita lo va a tirar.
De hecho, Pepe Chedraui leyó muy bien el ajedrez político y los nombramientos en el estado, por ello declaró recientemente que el líder y el sindicato con mayor representación en la Comuna será el reconocido.
Ya ven, se los dije.
¿No que no?
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