En febrero de este año, la empresa Investigación de Mercados INRA S. C. realizó un estudio de medición radiofónica a más de 2 millones de habitantes en Puebla, hombres y mujeres de entre 18 y 64 años, durante un periodo de 30 minutos de lunes a viernes, de 6:00 a 9:00 de la mañana, en el que se arrojaron resultados, para muchos, tendenciosos.
Esta medición de raiting, aseguran los que saben, “amañada”, se debió al cierre comercial del segundo semestre del año, que justamente culmina en este mes, para que las agencias comerciales nacionales concreten sus convenios publicitarios con diversos medios de comunicación, en el que uno de los requisitos es tener un estudio de validez oficial reciente que los coloque dentro de los tres primeros lugares para poder ser contratados para la difusión de su contenido.
Sin embargo, parece que el estudio, más allá de medir criterios comerciales, también midió el ego de algunos dueños de estos medios y en el peor de los casos, el de otros actores a los que no les ha favorecido la decisión de estos para ofrecerles espacio en alguna frecuencia.
Repito, dicen los que saben que una medición real tendría que valorar, de entrada, los noticieros de cada una de las frecuencias disponibles, su programación musical y hasta a los locutores.
De otra manera, atreverse a emitir porcentajes de audiencia en un solo horario, pero además en un breve periodo de tiempo, es como saber las respuestas de un examen en el que uno mismo hizo las preguntas.
De este mismo estudio de medición radiofónico, vale la pena destacar la posición número 11 en la que colocaron a La Tropical Caliente 102.1 FM. Una frecuencia que cuenta con una de las mejores programaciones musicales, pero que además alberga la fidelidad de una audiencia desde 1989, que también, vale la pena señalar, inició un nuevo noticiero en marzo de este año, el cual, evidentemente no está contemplado en el estudio que realizaron, ¿por qué será?
Publicar mediciones del pasado en el presente solo deja claro que la radio sigue siendo un gran medio de comunicación y el favorito de muchos, pese a lo que digan.
El que paga manda y esto incluye el favoritismo cargado a favor de quienes pagaron y necesitaron la información que publica INRA, por así convenir a sus intereses, ya que, por ejemplo, a la misma estación, es decir, La Tropical Caliente, un informe antecesor a este último la colocaba en el lugar número 4, por lo que resulta increíble que en tan poco tiempo y con mejores condiciones para los radioescuchas, haya bajado tanto.
Este fenómeno solo tiene una explicación y es que a ningún concesionario le va a gustar que otra estación que no es la suya le esté restando oyentes. Aunque la última palabra la tiene el consumidor, y ese ese no se equivoca.