Las lluvias intensas que se han registrado en Puebla capital entre marzo y septiembre de este año han obligado a las autoridades a desplegar un operativo permanente de atención y prevención, encabezado por el Comité “Tláloc”, que desde su conformación ha intervenido en mil 342 incidentes relacionados con el clima.
De acuerdo con Francisco Rodríguez Álvarez, secretario de Gobernación municipal, las precipitaciones constantes ya no deben considerarse como fenómenos excepcionales.
“Estamos ante un nuevo patrón climático, más frecuente e impredecible, que requiere acciones permanentes”, advirtió durante una sesión de la Mesa de Seguridad.
Principales afectaciones:
- 321 casos de inundación
- 81 árboles colapsados
- 64 anuncios espectaculares derribados
- 45 bardas caídas
- Más de 9,500 reportes de socavones
Tres líneas de acción: antes, durante y después
El Comité “Tláloc” opera bajo un esquema integral con tres fases:
- Prevención:
Con una inversión de 40 millones de pesos, se realizaron trabajos de limpieza y desazolve en más de 45 puntos críticos, con la participación de la Secretaría de Infraestructura, Servicios Públicos y el Soapap. - Reacción inmediata:
Protección Civil Municipal, con apoyo de dependencias estatales y federales, responde a emergencias en tiempo real. - Recuperación:
Tras los eventos, el Sistema DIF Municipal y la Secretaría de Bienestar y Participación Ciudadana brindan atención y apoyo a personas afectadas.
Zonas bajo vigilancia constante
El secretario de Seguridad Ciudadana, Félix Pallares Miranda, detalló que existen 12 puntos de riesgo de inundación que son monitoreados permanentemente: cuatro en la zona centro, tres al norte y cinco al sur, donde se ha identificado la mayor vulnerabilidad.
Trabajo conjunto y vigilancia ciudadana
Además de los cuerpos de emergencia locales y federales, el comité colabora estrechamente con Sedena, Conagua, Aguas de Puebla, Protección Civil estatal, Bomberos y grupos voluntarios, además de vecinos organizados que monitorean ríos y vasos reguladores como el del río San Francisco.
Rodríguez Álvarez cerró su intervención haciendo un llamado a mantener el trabajo coordinado entre ciudadanía y gobierno: “Las lluvias ya no son la excepción. Son una realidad constante y debemos actuar en consecuencia”.