La empresa de cárnicos Granjas Carroll de México (GCM), negó que esté usando cañones o bombas anti granizo para evitar las lluvias, pues afirma que la falta de agua también afecta en sus cultivos de maíz, trigo y plantación forestal.
Asimismo, denunció que son rehenes de un grupo de personas que han tomado los accesos de algunas de sus instalaciones, ocasionándole pérdidas millonarias, afectaciones a los trabajadores y a la población en general.
Por ello, lamentaron la protesta de campesinos pertenecientes a Puebla, así como Veracruz, la cual, comenzó el 16 de mayo, la cual aseguran que ocasiona pérdidas económicas y afectaciones a sus trabajadores, que en total son dos mil 800 de manera directa y ocho mil 400 de manera indirecta, quienes merecen no ser afectados en su situación laboral a causa de conflictos.
A través de un comunicado, la empresa informó que se ha visto obligada a recurrir a la intervención de las autoridades de gobierno de Puebla y Veracruz, para contrarrestar la campaña de desinformación y acciones en su contra, así como restablecer el orden.
De igual manera, puntualizó que han apoyado durante décadas a las comunidades vecinas a través de programas sociales y de a capacitación, los cuales permiten la diversificación de habilidades productivas para mejorar el ingreso de sus habitantes, además de respetar siempre la ley.
La empresa destacó que cuenta con certificaciones ambientales y cuentan con estándares globales.
“Granjas Carroll de México cumple con todas las medidas sanitarias, de inocuidad, de manejo del agua, plantas de tratamiento, reciclaje y disposición de residuos. En general con todos los lineamientos que se nos exige para producir alimentos de forma sustentable”, expusieron.
Asimismo, indicaron que las afectaciones que han hecho a la empresa, también alcanzaron a los animales y la cadena de logística, transporte ferroviario, carretero, carga y traslado de granos. Si bien, han respetado el derecho a la libre manifestación, en próximos días, analizarán los conductos legales necesarios.
Finalmente, agradecieron el apoyo del Gobierno de Puebla y el Gobierno de Veracruz, quienes han demostrado su apoyo a la inversión privada producción sustentable de alimentos y a la generación de empleos. “El bienestar de la región no puede estar secuestrado por intereses de un grupo”, concluyeron.