Las serpientes y escaleras
Por Ricardo Morales
Por razones políticas, un grupo de “ciudadanos” de colonias y unidades habitacionales cercanas a lo que es el cerro de Amalucan han comenzado una oposición al proyecto presentado por la administración estatal, el cual pretende rescatar este pulmón de la Angelópolis.
En ningún momento es la intención de la autoridad estatal privatizar el cerro, luego de convertirlo en un parque, ni muchos deforestar esta zona, que constituye uno de los últimos puntos verdes de la ciudad de Puebla.
Por el contrario, lo que se busca es ir al rescate de una zona que había sido olvidada y estaba amenazada por desarrolladores inmobiliarios, quienes ya habían comenzado a construir en las faldas de esta pequeña montaña localizada al nororiente.
De lo que se trata es de rescatar las 82.6 hectáreas que ocupa el cerro de Amalucan, de las cuales solo se ha a trabajar en 6.1, en donde se construirán áreas de recreación, canchas deportivas de futbol y básquet bol, andadores e incluso un lago artificial en donde se podrá nadar.
De manera concreta, el proyecto dotará al cerro de Amalucan de un área verde con infraestructura deportiva y esparcimiento, con reja perimetral para salvaguardar la seguridad de quienes visten el parque, ya que no tendrá costo la entrada.
Adicionalmente, habrán cinco estacionamientos, cinco casetas de vigilancia, 5 plazas de acceso, 5 módulos sanitarios, 4 áreas de juegos infantiles, 2 salones de usos múltiples, 4 vasos reguladores, 20 asadores para días de campo, tres módulos de mantenimiento, un teatro al aire libre, 4 módulos de servicios y 4 módulos de información, así como oficinas administrativas.
Complementan el desarrollo, tres canchas de futbol, cuatro canchas de usos múltiples, dos puentes mirador, un mirador, 24 módulos de lectura, un sendero, una escalinata, una cancha de paddel, un sendero peatonal secundario, uno principal y un área verde.
Asimismo, los actuales eucaliptos plantados, ya desde hace muchos años, serán sustituidos por especies menos agresivas con el medio ambiente.
Esto no es ninguna puntada, previo a la elaboración de este proyecto, un equipo de especialistas y ambientalistas, realizaron los trabajos correspondientes, para presentar los estudios de impacto ambiental, mismos que con fecha 14 de mayo fueron presentados a la Secretaría del Medio Ambiente para su aprobación.
Se contempla la sustitución de 419 árboles de un total de 24 mil 790 existentes.
La reforestación se llevará a cabo a través de tecorrales (55) y “dedos verdes” (los cuales crean micro ecosistemas).
Los tecorrales, cabe decir, evitan la erosión del suelo y las filtraciones hacia los mantos freáticos, así como logran la retención del agua.
El proyecto busca mejorar los suelos y la proliferación de especies en la zona, misma que actualmente no existe, debido a que los eucaliptos, son nocivos para la fauna.
Los nuevos árboles se contempla tengan entre 3 y hasta 4 metros de altura, siendo las especies consideradas: 35 clavo, 73 aile, 137 jacarandas, 60 ficus verde, 284 laurel de la india, 20 sauce llorón, 295 fresnos, 60 pinos patula, 55 encinos siempre verdes para un total de 1019 árboles nuevos para una zona que ya presenta graves síntomas de erosión.
Créame que se de lo que hablo, viví más de un año en Infonavit Amalucan, exactamente en cerrada Arce, Edificio A No.9, y se lo que es este cerro en donde pase parte de mi infancia.
El lugar era refugio de drogadictos y mal vivientes que hacían de las suyas en este lugar, el cual era totalmente inseguro para quienes jugábamos, corríamos y visitamos las famosos cuevas y la cantera.
En lo personal, creo que el proyecto traerá consigo un gran beneficio para las familias de las más de 120 colonias cercanas a la zona.