Combatientes yihadistas del Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, y del Partido Islámico de Turkmenistán, mataron a al menos 56 soldados del Ejército sirio, capturados el pasado 9 de septiembre en Idleb, en la batalla por el control de la base militar de Abu al Duhur.
Según indicó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con estas muertes se eleva a 71 el número de uniformados leales al régimen del presidente sirio Bashar al Asad, que han sido asesinados por los yihadistas.
La ONG también ha asegurado que los militares que se encontraban en esta base están desaparecidos o muertos o fueron tomados como prisioneros. Abu al Duhur está situada a unos 30 kilómetros de la ciudad de Idleb y era último bastión que el régimen mantenía bajo su control en esta provincia.
El cuartel llevaba asediado desde hacía dos años y fue capturado por los yihadistas aprovechando una tormenta de arena que redujo la visibilidad e impidió a la aviación siria prestar cobertura aérea a sus soldados sobre el terreno.
En un vídeo difundido por los yihadistas se muestran varios momentos de la ofensiva en medio de la tormenta de arena. Uno de los combatientes explica como gracias al polvo en suspensión, los combatientes pudieron atravesar los 800 metros de campo abierto que separaban la posición en la que se encontraban y la base militar aérea.
Las imágenes, cuya autenticidad no ha podido ser verificada, mostraron los cadáveres de supuestos soldados, así como una decena de aviones de combate, un helicóptero y un tanque, además de cajas que supuestamente contienen armamento y munición y que fueron capturadas por los asaltantes.
En el vídeo también se puede ver como los yihadistas contaron con el apoyo de al menos tres tanques, lanza-cohetes y metralletas de gran calibre.
