A Puerta Cerrada
Jorge Rodríguez Corona
Los cambios en el gabinete anunciados este jueves por el presidente Enrique Peña Nieto podrían modificar las piezas del tablero priista en que se juega la sucesión del gobernador Rafael Moreno Valle en Puebla.
La llegada de nuevos titulares a las secretarías obliga a preguntarse qué ocurrirá con el resto de los funcionarios que laboran en ellas, desde subsecretarios hasta delegados estatales.
Aquí es donde las remociones y los nombramientos se cruzan con la contienda interna del PRI para definir candidato a gobernador no solo en 2016 sino también en 2018, por aquello de que una vez que el sucesor de Moreno Valle rinda protesta el 1 de febrero de 2017, de manera automática comenzará la puja por el siguiente mandato.
Desde ayer hay nuevos titulares federales en la SEP, Sedesol, Sedatu, Sagarpa, Semarnat, Turismo y Relaciones Exteriores; además de la Jefatura de la Oficina de la Presidencia, la Comisión Nacional de Seguridad y el ISSSTE.
La próxima elección de gobernador obliga a poner los ojos en lo que hagan José Antonio Meade y José Calzada Rovirosa al frente de la Sedesol y la Sagarpa, en ese orden, puesto que tres de los muchos suspirantes tricolores que quisieran competir por Casa Puebla dependen laboralmente de ellos.
El primer caso y el que más expectativa genera desde que se supo de los relevos es el de Juan Carlos Lastiri Quirós, quien hasta ayer por la noche figuraba todavía como subsecretario de Planeación, Evaluación y Desarrollo Regional de Sedesol.
Aun cuando la fortaleza de Lastiri radica en su relación personal con el oficial mayor de la Secretaría de Gobernación, Jorge Márquez Montes, no está de más cuestionarse qué pasará con él en el futuro inmediato: si permanecerá en Desarrollo Social con Meade o si partirá a una nueva encomienda, y en caso de que así sea: de qué características e importancia sería ese nuevo encargo.
Otro tirador en la mira del respetable ante los ajustes de Peña Nieto es Juan Manuel Vega Rayet.
Metido en la sucesión de Moreno Valle más por iniciativa de terceros que por un interés personal, el expresidente municipal de Izúcar de Matamoros enfrenta una situación más sencilla: su continuidad en la delegación estatal de Sedesol depende ciento por ciento de Lastiri.
Así que solo habrá que esperar a ver qué ocurre con el subsecretario para conocer el destino de Vega Rayet.
El tercero de los implicados en este ambiente de expectación es ni más ni menos que Alberto Jiménez Merino.
El delegado de Sagarpa y declarado aspirante a Casa Puebla tiene nuevo jefe, por lo que podría resultar afectado en los días por venir.
Resulta ocioso especular por ahora acerca de las posibilidades de éxito de cada uno de estos tres personajes en el proceso de sucesión de gobernador, en caso de que les pidan su renuncia, sin saber a dónde irán a parar después.
Así que lo más recomendable es mantenerse pendientes de ellos.
En una de esas no cambian a ninguno y todo sigue igual.
Esa también es una opción.
@jorgerdzc
