Desde hace tiempo lo advertí, el coordinador general del Gabinete estatal, José Luis García Parra, y el alcalde capitalino, Pepe Chedraui, han construido una relación de cercanía y a prueba de balas. A esta dupla se suma ahora la nueva secretaria del Bienestar, Laura Artemisa García Chávez, con lo que conforman un trío para el 2027, el cual luce imparable.
Muchos quisieron verlos pelear, finalmente los tres buscan prácticamente lo mismo, ser candidatos en 2027, sin embargo, parece existir un acuerdo político entre los tres personajes para evitar el golpeteo, al cual es aficionada la clase política local y también la nacional.
Pepe Chedraui es el actual edil capitalino y quien posee por obvias razones, el mayor nivel de conocimiento rumbo a la elección que será un referéndum para la administración armentista, la cual rendirá en breve su primer informe de labores.
Pepe es un hombre sumamente inteligente, el cual ha evitado a toda costa confrontarse con el gobernador en turno, como sí lo han hecho otros personajes que le antecedieron en el cargo y no pudieron conseguir el objetivo de hacerse de la candidatura a la gubernatura, como era su objetivo.
Ya hemos dado cuenta de los enfrentamientos entre varios de los ediles que buscaron posicionarse desde la capital y entraron en confrontación con el gobernador en turno y terminaron perdiendo ambos y su partido, ejemplos abundan, los más simbólicos Marín-Doger y Barbosa-Claudia Rivera.
Chedraui Budib es un hombre con inmejorables relaciones, quizá como lo era su padre, sea el mejor publirrelacionista que exista en Puebla y ha entendido perfectamente que nada va a ganar si se enfrenta al gobernador Armenta de manera frontal y, al contrario, se ha dado a la tarea de hacer sinergia con las que son consideradas como sus más importantes cartas, García Parra y Laura Artemisa.
El alcalde capitalino sabe que él no necesita posicionamiento, es el personaje más conocido en la capital, su apellido es una marca, lo que sí necesita es tener un excelente 2026 y que la coyuntura obligue al gobernador a tener que buscar una alternativa diferente a sus propias cartas, como le ocurrió a Marín en 2007, en donde tuvo que optar por Blanca Alcalá.
El coordinador estatal del gabinete, José Luis García Parra, es un personaje sumamente pragmático, el cual en vez de confrontarse con Chedraui y verlo como un adversario, ha sabido establecer una relación de cercanía y camaradería con el edil capitalino, misma que se evidenció durante la toma de posesión de la rectora Lilia Cedillo el pasado 4 de octubre, cuando al terminar este evento, el funcionario estatal abandonó el edificio Carolino a bordo de la camioneta del edil capitalino, la cual era manejada por el propio Pepe Chedraui.
García Parra sabe que si Morena decide ir con un candidato del sexo masculino, la lucha por la candidatura está solo cerrada a Chedraui y él, pero que haciendo sinergia él puede crecer como lo está haciendo y a ritmos acelerados.
En tan solo un año, el posicionamiento de García Parra creció 22 puntos y bastó con una campaña de espectaculares de una publicación, Campaigns & Elections para que su nombre comenzara a circular entre el círculo rojo, pero también entre la ciudadanía.
José Luis ha comenzado a encabezar una serie de eventos en la capital del estado y a ver quién lo puede bajar, luego de que además en las mañaneras del gobernador Armenta goza de un escenario de privilegio.
Lo mismo ocurre con la secretaria del Bienestar, Laura Artemisa García Chávez, quien recientemente tomó el control de esta estructura, la cual le permite ser actualmente la mujer mejor posicionada en Puebla capital, superando a otras posibles aspirantes y con el espacio abierto en 2026 para seguir creciendo.
García Chávez sabe que si Morena va con una candidata del sexo femenino el camino está abierto para su posible postulación, misma que se deberá consolidar en 2026 con el trabajo que desarrolle a través de su nueva encomienda al frente de Bienestar, con todo lo que representa el contar con una estructura de este tamaño.
Este trío luce imparable rumbo al 2027 y lo mejor es que han optado por apoyarse mutuamente en vez de destruirse, y eso pocas veces se ha visto en vísperas de la lucha por el poder.




