El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que pausará de forma permanente la migración de países del “tercer mundo”, argumentando que esta decisión permitirá que “el sistema estadounidense se recupere por completo”. El anuncio se dio pocos días después del tiroteo en Washington D.C. que dejó una soldado muerta y otro elemento de la Guardia Nacional en estado crítico.
A través de su red Truth Social, Trump afirmó que la política migratoria ha erosionado avances tecnológicos y las condiciones de vida en Estados Unidos. Por ello, señaló que su administración pondrá fin a las admisiones ilegales registradas durante el gobierno de Joe Biden y reforzará una política migratoria más estricta.
El mandatario republicano añadió que expulsará a quienes no aporten beneficios al país, retirará prestaciones y subsidios federales a no ciudadanos, y desnaturalizará a migrantes que consideren un riesgo para la “tranquilidad interna”. También reiteró su compromiso de deportar a cualquier extranjero que represente una carga pública.
El planteamiento ocurre tras el ataque armado que sufrió la Guardia Nacional. En el incidente, Sarah Beckstrom, de 20 años, perdió la vida, mientras que Andrew Wolfe, de 24, continúa en condición crítica. El agresor, identificado como Rahmanullah Lakanwal, un ciudadano afgano de 29 años que llegó a EE.UU. en 2021 bajo el programa Operation Allies Welcome, también permanece hospitalizado.




