Tras el suicidio de Raúl Montoya Herrera, trabajador del Colegio de Bachilleres del Estado de Puebla (Cobaep), su hermana, Adriana Montoya Herrera, solicitó una investigación al organismo descentralizado pues aseguró que existe hostigamiento a un grupo de empleados al interior.
En rueda de prensa, aseguró que al menos unos 200 empleados se encuentran en la dinámica de reducción de horas y cambio en la sede de plantel en lugares donde no les he posible trasladarse para realizar su trabajo, situación que los orilla a renunciar y salir sin una liquidación, además, la mayoría de este padrón se encuentra en vías de jubilación.
Por lo anterior, la hermana del hoy occiso, en compañía de la viuda, Débora Pinis, pidió una investigación del gobierno del estado al Cobaep, pues por los hostigamientos fue que su familiar se quitó la vida.
“Yo le pido al señor Gobernador que ordene una investigación, para que este tipo de hechos no sigan ocurriendo, y no sólo por mi hermano, sino por todos los trabajadores”, dijo.
Adriana Montoya Herrera atribuyó el hostigamiento a los trabajadores a disputas que existen al interior del Cobaep, por cuestiones políticas y sindicales.
Comentó que su hermano trabajó ocho años en esa institución, desempeñándose como impresor especializado. Sin embargo, Raúl era enviado a barrer, a lavar los baños y a hacer trabajos de intendencia, incluso a dar clases y asesorías a los alumnos, pues tenía conocimientos en historia, matemáticas y otras materias, toda vez que era “muy culto”.