La planta de Volkswagen México en Puebla atraviesa una de sus peores crisis en la última década. Según cifras del Inegi, entre enero y octubre de 2025 la producción de vehículos cayó 16.3%, mientras que las exportaciones disminuyeron 19.5% respecto al mismo periodo de 2024.
El retroceso posiciona a Volkswagen como la automotriz con la mayor caída en producción en el país y la segunda más afectada en exportaciones, sólo por debajo de Mazda. En contraste con el crecimiento de años anteriores, la armadora alemana enfrenta un escenario de paros técnicos, incertidumbre laboral y presión comercial derivada de la guerra arancelaria entre Estados Unidos y Europa.
El secretario de Gobernación estatal, Samuel Aguilar Pala, confirmó que la empresa analiza el despido de mil 93 obreros como parte de una reestructuración interna ligada al Plan 2030, una estrategia global de modernización que incluye recortes y reingeniería laboral. Sin embargo, la Coparmex Puebla aseguró que no existe un plan formal de despidos, lo que mantiene la incertidumbre entre los trabajadores.
Durante octubre, la planta en Cuautlancingo, Puebla, registró al menos ocho paros técnicos, situación que obligó a los empleados a tomar vacaciones o aceptar descuentos salariales. De septiembre a noviembre suman diez paros, reflejo de la inestabilidad operativa en la armadora más grande del estado.
A nivel global, Oliver Blume, director general del Grupo Volkswagen, anunció una reducción de 42 mil empleos en distintas filiales: 35 mil en Volkswagen, 7 mil 500 en Audi, 4 mil en Porsche y mil 600 en Cariad. La medida busca responder a la caída en ventas de vehículos eléctricos y al avance de fabricantes chinos con menores costos de producción.
Mientras la industria automotriz mexicana apenas creció 0.69% en 2025, Volkswagen enfrenta un desplome sostenido.
