Alfredo Téllez
El INEGI reveló que el 42 por ciento de las familias mexicanas ya cuenta con ambos padres trabajadores, lo que supone el inicio del cambio en la mentalidad poblana, y mexicana, reveló el catedrático del Tecnológico de Monterrey Campus Puebla (ITESM), Héctor Cerezo Huerta.
El estudio del “Colectivo de Hombres a Favor de una Nueva Masculinidad”, reveló que en Puebla 3 de cada 10 masculinos ya tienen una idea distinta del tópico de que los padres deben ser los proveedores del hogar y que aceptan una mayor igualdad con las mujeres.
En ese sentido, Cerezo Huerta, recordó que la reforma a la Ley Federal de Trabajadores al Servicio del Estado, la cual se llevó a cabo el pasado año, introdujo una nueva obligación, donde los padres de familia dispondrían de cinco días de incapacidad, con pago íntegro del salario, tras el nacimiento de un hijo, situación que demostró la modernización de México en el tema.
“Puebla es conservadora en ciertos fenómenos familiares, pero no así en fenómenos de paternidad. En ese sentido, no tiene el tinte conservador al que se ha asociado la ciudad de Puebla. En cambio, en otros fenómenos, indudablemente creo que sí”, apuntó.
De esta manera, reconoció que el proceso fue el inicio de la introducción de los hombres en aspectos de paternidad y en la educación de sus hijos, lo cual implica un rol en el cambio de los masculinos, quienes se convierten en corresponsables de la unidad familiar, apareciendo la humanización y eliminando tópicos como que éstos no lloran, que deben estar siempre sexualmente preparados y ser los únicos cuidadores de la familia.
Pese a eso, reconoció que el proceso no es rápido y que los estereotipos continúan apareciendo con demasiada frecuencia, detallando que “el padre poblano” es un claro ejemplo, al considerarlo el cuidador y el encargado de satisfacer las necesidades de la familia, aunque manteniéndose en un segundo plano en relaciones emocionales donde los hijos demuestran “mayor conexión con la madre”.
“El padre poblano es un padre preocupado por satisfacer necesidades materiales, disciplina, roles, reglas, límites. Es un padre que se comunica, pero de una manera más estructural y menos funcional”, comentó.
