La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) informó que el cierre de accesos irregulares en la autopista México-Puebla-Veracruz presenta un avance del 60%, como parte del Plan “Cero Robos”, una estrategia federal impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para fortalecer la seguridad en carreteras federales.
El titular de la SICT, Jesús Antonio Esteva Medina, detalló que las labores se concentran principalmente en las autopistas México-Puebla, México-Querétaro y Mazatlán-Culiacán, donde se han detectado puntos de riesgo y rutas utilizadas por grupos delictivos para el robo a transportistas o para huir de las autoridades.
De los casi 40 accesos clandestinos identificados en la México-Puebla, 23 ya fueron clausurados, mediante la construcción de muros de concreto, zanjas y estructuras de mampostería que impiden el paso no autorizado de vehículos. La meta es cerrar todos los accesos ilegales antes de que termine 2025.
En coordinación con la Guardia Nacional (GN) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), la SICT también implementa un sistema de videovigilancia integral, que incluye la instalación de 218 cámaras y 12 arcos de seguridad móviles en 60 puntos estratégicos de la autopista México-Puebla-Orizaba. Estos dispositivos estarán conectados al Centro Nacional de Monitoreo, junto con el sistema de Caminos y Puentes Federales (Capufe), para garantizar supervisión permanente y reacción inmediata ante incidentes.
El funcionario federal explicó que esta estrategia busca reducir los índices delictivos, prevenir accidentes y mejorar la seguridad vial, especialmente en zonas donde se concentran los robos al transporte de carga.
“Estamos avanzando bien; esperamos concluir los cierres en dos meses más, particularmente en la México-Veracruz y la México-Querétaro”, afirmó Esteva Medina, al destacar que las obras representan una acción integral de seguridad carretera que refuerza la presencia del Estado en los principales corredores logísticos del país.