En un acto lleno de esperanza y humanidad, el Gobierno de Puebla, conmemoró el Día Nacional de la Donación y Trasplante de Órganos y Tejidos y reafirma su compromiso con el fomento a una cultura solidaria que salve vidas.
La conmemoración contó con la presencia de la directora general del Centro Nacional de Trasplantes del Gobierno de México, Rosa Erro Aboytia, quien entregó un reconocimiento al Gobierno de Puebla, por ocupar el cuarto lugar a nivel nacional en donación de tejidos y órganos y el secretario de Gobernación, Samuel Aguilar Pala, en representación del ejecutivo estatal, Alejandro Armenta, recibió dicha distinción.
En su mensaje, la funcionaria federal llamó a mantenerse como ejemplo en el país, ya que la entidad ha sido solidaria con el resto de los mexicanos y aseguró que se debe trabajar con gobiernos humanistas para construir un México sin lista de espera.
Rosa Erro Aboytia llamó a la población a sumar esfuerzos, crear conciencia e incrementar la difusión de donación de órganos, para que de esta manera se otorgue voz a las más de 19 mil personas que en el país están en lista de espera. “Todos los mexicanos tenemos el gen del altruismo y la generosidad“, afirmó.
En su oportunidad, el secretario de Gobernación, Samuel Aguilar Pala, destacó que el gobierno humanista que encabeza Alejandro Armenta, tiene total disposición para coadyuvar en el tema legislativo e impulsar políticas públicas que contribuyan a ser más eficientes en la donación de órganos. En este contexto, exhortó a las y los poblanos a fortalecer la cultura de otorgar vida a otras personas.
En su mensaje, el secretario de Salud, Carlos Alberto Olivier Pacheco, subrayó que esta acción es una muestra de que, en el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, la salud no es un privilegio, sino un derecho, y que la donación de órganos es parte esencial de la justicia social que se busca consolidar en el país. Destacó que Puebla, avanza en este camino bajo el liderazgo del gobernador Alejandro Armenta, reconociendo no solo a las familias donadoras, sino también a las instituciones y equipos de profesionales que hacen posible cada proceso de trasplante con sensibilidad y compromiso.
“Donar órganos no es el final de una vida, es el comienzo de muchas otras”, afirmó con firmeza Enrique Huerta Ramírez, hijo del periodista Carlos Martín Huerta Macías, quien comentó la historia de Diana, hermana e hija, una joven de 28 años, maratonista, amante de los perros, quien en meses pasados perdió la vida, ante un fuerte dolor de cabeza que la llevó al hospital de donde no volvió a salir, relató su hermano.
“Tomar la decisión no fue fácil, pero entendimos que a veces no se trata de uno mismo, sino de los demás”, relata Enrique en medio del duelo, su familia encontró consuelo al pensar que, en algún lugar, alguien recibía la mejor noticia de su vida, la esperanza de seguir viviendo gracias al gesto de Diana.
De la misma manera, Guadalupe Jaime Trujillo compartió su testimonio de vida como receptor de un riñón. A los 22 años fue diagnosticado con insuficiencia renal, pero gracias al gesto altruista de una familia donante, hoy puede contar su historia. “Gracias le doy a Dios, yo recibí el riñón de un donante cadavérico, gracias a él estoy acá”, expresó con gratitud y llamó a las familias a considerar la donación como un acto de amor que trasciende.
Como parte de esta jornada, el gobierno honró a los familiares de las personas donantes y les entregó un reconocimiento por su altruismo, generosidad y amor por dar vida. También, previamente se llevó a cabo el concurso de dibujo “Dibujando Esperanza”, donde participaron hospitales con licencia sanitaria para la procuración y trasplante de órganos, los cuales también fueron reconocidos. Dicha actividad tuvo el propósito de sensibilizar sobre la importancia de la donación.