Vidulfo Rosales Sierra, abogado de los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, renunció a su cargo como representante legal del caso y dejará de colaborar con el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan.
La renuncia se da a casi 11 años de la desaparición de los estudiantes y se rumora que Rosales se unirá al equipo del presidente electo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Hugo Aguilar Ortiz.
En una entrevista para Infobae México, Rosales Sierra afirmó que su renuncia al CDHM Tlachinollan se debió a motivos personales y de salud, y que la defensa de los padres y madres de los estudiantes de Ayotzinapa exigía “plena dedicación” lo que complicaba su situación médica. Asimismo, negó que su decisión tuviera que ver con una invitación para colaborar con la SCJN.
“No puedo eludir mi deber de clase. Soy de una comunidad indígena enclavada en la agreste y encantadora Montaña de Guerrero, toda mi vida he caminado a contracorriente por senderos escarpados producto de la miseria y marginación, por ello tengo la capacidad de sentir las injusticias cometidas contra cualquiera y en cualquier parte”, señaló.
Continuidad del caso
A pesar de su renuncia, Rosales aseguró que la defensa del caso Ayotzinapa continuará a través del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, el Centro Prodh y otras organizaciones. También destacó que la relación con el gobierno actual se ha mantenido en términos de diálogo y apertura.
“Decir que desde otra trinchera continuaremos en la lucha por la justicia y por los derechos humanos”, enfatizó.
Próximos pasos
Se espera que el caso siga adelante con el acompañamiento de las organizaciones y se llevarán a cabo reuniones pendientes entre los familiares de las víctimas y el gobierno para definir nuevas líneas de investigación.