Síntesis
A través de una investigación e información recabada en las últimas semanas en el estado de Puebla, realizada por el periódico Síntesis, se detectó que la estructura electoral del PRI en la entidad opera encabezada por un grupo de foráneos enviados por el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) que en coordinación con empleados de la Secretaría de Desarrollo Social federal (Sedesol) ocupan los padrones de los programas sociales de la dependencia para coaccionar el voto de los ciudadanos.
Los responsables del organigrama priista son Octavio Flores Millán, coordinador electoral del CEN del partido tricolor en Puebla, quien cuenta con un pasado de irregularidades como funcionario en el Distrito Federal, de donde es originario.
Otros personajes ligados a esta trama son Gustavo Adolfo González Balderas, coordinador del Modelo Integral de Riesgos Electorales (MIRE), nacido en Ciudad Madero, Tamaulipas, y la hidalguense Estela Alexia Lara Rodríguez, coordinadora estatal de Activismo Político. Todos ellos fueron enviados por la Secretaría de Acción Electoral y la Secretaría de Organización del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI.
El MIRE, dirigido por el tamaulipeco Gustavo Adolfo González Balderas, cuenta con 12 operadores, 7 de ellos foráneos.
González Balderas trabaja bajo tres líneas de acción: diseño de campañas negras, captación de votos y acciones jurídicas.
Adicionalmente, este grupo está respaldado por una Coordinación Jurídica que encabeza el poblano José Mario Conde Rodríguez, quien cuenta con un equipo de 10 personas ubicadas en puntos estratégicos de la entidad.
Los operadores foráneos representan el 30 por ciento de la estructura con la que el Revolucionario Institucional buscará ganar los 16 distritos federales de Puebla en aras de conformar una mayoría significativa en la Cámara Ruja del Congreso de la Unión.
Los tres mandos externos reciben un pago mensual en efectivo de 30 mil pesos por parte del Comité Ejecutivo Nacional del PRI; mientras que a quienes están a su cargo se les entregan 14 mil pesos.
Estructura electoral
A través de los integrantes de este modelo los priistas elaboran perfiles para destacar los puntos negativos de sus adversarios; en ocasiones, éstos son utilizados para denunciar hacia ellos mismos ataques de otros partidos.
En cuanto a la atracción de votantes, su labor se centra en detectar a los líderes que pueden sumar comprando con dinero y en algunos casos, ocupan las amenazas para contar con su “apoyo”.
Asimismo, el MIRE, respaldado por la Coordinación Jurídica del tricolor, trabaja en la realización de denuncias en los 16 distritos de Puebla, buscando que los partidos contrincantes sean sancionados por las autoridades electorales por supuestas reincidencias.
Los recursos económicos
Esta estructura opera con los apoyos económicos que el Comité Ejecutivo Nacional del PRI envía para la operación electoral.
El registro de los Representantes Generales del tricolor que cuidarán la elección es una de las complicaciones a las que se han enfrentado. Hasta principios de mes contaban con alrededor de mil 300 para cuidar 7 mil 90 casillas.
Por otra parte, en el caso de los Representantes de Casilla ha habido resistencia de los grupos poblanos para subir a la plataforma en línea sus datos, situación que ha generado disputas entre los operadores locales y los foráneos.
De acuerdo con investigación del reportero José Martínez, el PRI diseñó una estrategia para tratar de recuperar espacios políticos en Puebla después de la estrepitosa derrota tras los escándalos del ex gobernador Mario Marín, el “gober precioso”, cuyos excesos propiciaron una derrota electoral sin precedentes en Puebla.
Sin embargo, la incursión del equipo ajeno a Puebla no ha sido fácil, una vez que han existido fallas en la comunicación y fluidez de la información que se requiere para la operación electoral.
Activismo político
Estela Alexia Lira Rodríguez tiene bajo su mando a 63 personas para efectuar su labor. Cuenta con 20 enlaces que reportan diariamente. 4 de los cuales son foráneos provenientes de Hidalgo, igual que su líder.
La labor de Alexia Lara está centrada en la promoción del voto, y será la encargada de efectuar la movilización de las personas “promovidas”.
Para ello se encargan de supervisar la integración de estructuras, la promoción del voto y la creación de la logística de movilización. Con base en estas acciones se bajarán los recursos de las oficinas centrales del PRI.
El ‘Cuarto de riesgos’
Ante la amenaza de una derrota en las elecciones, el PRI ha dispuesto un “Cuarto de riesgos” en la sede del Comité Directivo Estatal, en el que los operadores foráneos a la cabeza de la estructura se reúnen cotidianamente con Ana Isabel Allende, dirigente estatal del PRI, e Ismael Hernández Deras, delegado general del CRN en Puebla. Ahí se afinan los puntos más endebles del funcionamiento de la estructura.