La presa Manuel Ávila Camacho, también conocida como de Valsequillo, recibirá atención después de 79 años de funcionamiento continuo, luego de que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) reconoció la existencia de una fuga en las compuertas de servicio.
Sus compuertas originales, instaladas entre 1941 y 1946, presentan una fuga significativa de agua, la cual se estima entre 6 y 8 metros cúbicos por segundo, lo que podría afectar el suministro de agua para riego agrícola en más de 28 mil hectáreas.
La Conagua explicó que la fuga se debe a la degradación del acero y concreto utilizados en la construcción de las compuertas.
Asimismo, la comisión aseguró que no se trata de una fractura total en la infraestructura, por lo que la cabeza, cortina, embalse y zonas periféricas a la obra se encuentran en buenas condiciones.
El organismo aseguró que con la rehabilitación de las compuertas se “garantizará que ya no exista perdida del agua almacenada”, asimismo la dotación de agua para el Distrito de Riego 030 Valsequillo, así como para los módulos que la conforman para el riego agrícola.