Tras años de espera por ver una pelea entre el campeón invicto de los welters, este sábado el estadounidense Floyd Mayweather Jr., y el veloz filipino Manny Pacquiao, protagonizarán el combate que más ganancias genere en la industria del deporte, con alrededor de 500 millones de dólares.
En juego están los dos títulos mundiales de peso welter de Mayweather en el Consejo Mundial de Boxeo y la Asociación Mundial (AMB), y el de Pacquiao en la OMB, pero además, el ganador se llevará un cinturón de esmeraldas, oro y plata, valuado en un millón de dólares, donado por el CMB.
Mayweather, de 38 años de edad y con foja de 47-0 (26 KO), ha basado sus triunfos en un estilo defensivo que hasta ahora nadie ha podido superar, la velocidad y un golpeo quirúrgico, puntual, casi lo justo para marcar los puntos necesarios que le den el triunfo.
En tanto que el filipino, 36 años y marca de 57-5 -2 (38 KOs), tiene en la velocidad y el empuje sus mejores armas, con un volumen de impactos por round que probablemente obligue a Mayweather Jr. a soltar más golpes que en otras peleas, si es que quiere mantener a raya al Pacman y evitar que las matemáticas jueguen en su contra en las tarjetas de los jueces.
Además, Pacquiao tiene como un plus haber enfrentado a boxeadores más duros en comparación con los rivales de Mayweather Jr., lo que le ha permitido mejorar su estilo agresivo y valiente.
Pase lo que pase, puede que los dos púgiles salgan satisfechos al final del combate pues tendrán los bolsillos repletos de dólares, ya que de los 500 millones generados por la llamada “pelea del siglo”, 300 millones serán para ellos, de éstos, 180 para Mayweather Jr, y 120 para Pacquiao.