Las negociaciones entre Estados Unidos y China continúan este domingo en Ginebra, Suiza, con el objetivo de reducir las tensiones comerciales que han impactado la economía global. Este segundo día de reuniones genera gran expectativa, ya que podría influir en la apertura de los mercados bursátiles internacionales.
Las delegaciones están encabezadas por Scott Bessent, secretario del Tesoro de EE.UU., y Jamieson Greer, representante de Comercio, mientras que del lado chino lidera el viceprimer ministro He Linfeng. Las conversaciones se realizan en la residencia del embajador suizo ante la ONU, lugar elegido por su privacidad y seguridad.
El primer día de negociaciones fue intenso, con sesiones de más de siete horas, abordando los altos aranceles cruzados: 145 % para productos chinos y 125 % para estadounidenses. Sin embargo, el presidente Donald Trump calificó el encuentro como “muy bueno” y aseguró que hubo “muchos acuerdos”, lo que eleva la presión para que haya avances concretos.
Un giro relevante es la participación del ministro de Seguridad Pública de China, Wang Xiaohong, revelada por el Wall Street Journal. Su presencia sugiere que además de asuntos comerciales, se discute el tema del fentanilo, una droga sintética vinculada a la epidemia de opioides en Estados Unidos. Trump ha vinculado el tema del fentanilo con el aumento de aranceles a China, México y Canadá, como parte de su estrategia para frenar el ingreso de esta sustancia mortal.
A pesar del optimismo de Trump, China no ha emitido comentarios oficiales sobre los avances. Sin embargo, se espera que esta ronda de negociaciones permita establecer las bases para reducir los aranceles mutuos y avanzar hacia una resolución más amplia de los conflictos comerciales entre las dos mayores potencias económicas del mundo.