La sesión de la Comisión de Patrimonio y Hacienda del Ayuntamiento de Puebla, programada para el lunes 7 de octubre, a las 9:00 horas, fue suspendida por falta de quórum. Esta reunión era clave para abordar la adquisición de una deuda pública de 600 millones de pesos, pero la inasistencia de algunos regidores, como Carlos Montiel Solana, quien presentó un justificante, y Cristian Lucero Guzmán, sin explicación, retrasó la discusión. La sesión fue reprogramada para el martes 8 de octubre.
El gobierno saliente de Adán Domínguez enfrenta serios problemas financieros, ya que el presupuesto para el 2024 está prácticamente agotado. Esto ha obligado a considerar la contratación de una deuda pública de 600 millones de pesos que se pagaría a lo largo de 10 años, lo cual generó preocupación en la administración entrante, encabezada por José Chedraui Budib.
El tesorero municipal, Omar Coyopol, confirmó que los recursos de este año ya han sido ejercidos, y la falta de participaciones federales ha dejado las arcas municipales vacías. Esta situación compromete la capacidad del nuevo gobierno de cumplir con sus primeras obligaciones operativas, lo que ha generado alarma tanto en los ciudadanos como en los regidores.
Regidora evita preguntas sobre la deuda
Ante los cuestionamientos sobre el destino de la deuda, la regidora presidenta de la Comisión de Patrimonio y Hacienda, Ana María Jiménez Ortiz, evitó dar entrevistas y se limitó a decir que “no sabía nada” y que los detalles deberían consultarse en el orden del día o con el equipo de regidurías.
Jiménez Ortiz también evitó responder a las preguntas sobre si el viernes pasado se realizó una reunión entre los regidores del PAN, en la cual se les habría informado sobre el exceso en el presupuesto y la falta de recursos que afectaría la administración de Pepe Chedraui.