Hoy será un día importante para el presidente municipal electo de Puebla, José Chedraui Budib, quien presentará a los integrantes del gabinete que le acompañará a gobernar la ciudad por el periodo 2024-2027.
Porque vaya que Pepe tiene un gran reto en la ciudad capital, la cual padece, desde hace un buen rato, graves problemas en materia de inseguridad, de infraestructura y de movilidad.
El primero de los inconvenientes es un fenómeno general, desde luego, pero que se ha agudizado en Puebla, donde ya empieza a parecer normal el homicidio al puro estilo de los grandes carteles y las grandes mafias de la droga.
Parece no haber lugar seguro en la ciudad, donde lo mismo ocurre una ejecución en Lomas de Angelópolis, la zona más popof, que se registra un narcomensaje con las cabezas de sujetos asesinados y destazados en cualquier colonia popular.
Apenas ayer se registró el asesinato de un menor de 15 años, quien manejaba un automóvil Camaro –de color negro–, en el bulevar Forjadores, a la altura de Plaza San Diego.
El menor estaba siendo perseguido por sujetos que viajaban en una camioneta Grand Cherokee, y quienes le dispararon cinco veces por negarse a detenerse y a bajar del automóvil para despojarlo del mismo, esto al momento de incorporarse al Periférico Ecológico.
Lamentablemente, el menor falleció al llegar al hospital de San Andrés Cholula, pues se desangró y ya fue imposible poder salvarle la vida.
La inseguridad está latente en la ciudad de Puebla, por lo que Pepe Chedraui tendrá que emplearse a fondo en el tema, ya que el fenómeno está desbordado.
El segundo de los graves problemas que hereda el edil morenista son los baches.
La ciudad, como todo mundo lo sufre por todas partes, está totalmente destrozada por las lluvias y por el pésimo material utilizado para la relaminación y el reencarpetamiento de las distintas avenidas.
No existe una sola calle en la ciudad que no tenga baches y hundimientos que ya parecen socavones, los cuales le están pegando de lleno a los automóviles y al bolsillo de los poblanos.
Por el norte, por el sur, por el poniente y el oriente de la ciudad están los malditos baches y nadie hace nada para arreglarlos.
Pepe Chedraui va a tener que emprender y ejecutar una millonaria campaña especial antibaches o cazabaches para poder resolver el grave problema que aqueja a los poblanos.
Los baches se han convertido en un verdadero problema del que el Ayuntamiento de Puebla ya se deslindó, por lo que habrá que preguntarle al edil entrante qué opina al respecto.
Y, finalmente, un problema más es el tema de movilidad en la ciudad, pues ahora todo mundo hace lo que se le pega la gana, ya que si se les antoja bloquear y cerrar las calles, ahora cualquier hijo de vecino lo puede hacer por el motivo que sea, sin que la autoridad lo pueda evitar.
La solución no está en solo peatonalizar las calles, sino en implementar una estrategia para reordenarlo todo, tanto al transporte –público y privado– como a los ambulantes, quienes se empeñan en mantenerse apostados en las principales calles del Centro Histórico.
El fenómeno del ambulantaje va de la mano con el de movilidad, toda vez que las distintas agrupaciones se han fortalecido y ahora están distribuidas en distintos puntos de la ciudad, donde dificultan la movilidad vehicular y de los peatones.
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Armenta y la BUAP
El viernes pasado, el gobernador electo de Puebla, Alejandro Armenta Mier, sostuvo una primera reunión oficial, después de haber ganado la elección del pasado 2 de julio, con la rectora de la BUAP, Lilia Cedillo Ramírez, y su equipo más cercano.
Durante el encuentro, el mandatario refrendó su respeto a la institución de la que es egresado, a la primera rectora de la máxima casa de estudios, a su autonomía, al trabajo social y a la labor que ejerce en sociedad.
De hecho, Alejandro Armenta sostuvo que “la universidad es intocable en su autonomía, lograda por todos los que la han consolidado, y no debe existir intromisión política”.
Asimismo, hizo hincapié en lograr proyectos conjuntos entre su gobierno y la BUAP para que Puebla se convierta en la capital de la tecnología y la sostenibilidad, impulsando el talento poblano y estudiantil.
La intención del gobernador electo es que en la BUAP se construya la tecnología necesaria y se sienten las bases para impulsar la creación de compañías financiadas por los migrantes que radican en los Estados Unidos.
En ese sentido, la universidad deberás ser la generadora de paneles solares, por ejemplo, para hacer realidad los proyectos productivos que financiará el gobierno entrante con una partida inicial de 100 millones de pesos.
La reunión entre Alejandro Armenta y la doctora Lilia Cedillo da muestras de que, con respeto, sin anteponer los temas políticos, la relación BUAP-Gobierno puede generar frutos de beneficio para Puebla y los poblanos.
Afortunadamente, atrás quedó la política amenazante que se utilizó en el barbosismo y el morenovallismo para tratar de hacerse del controlo de la BUAP.
Sin duda, este primer encuentro es el preámbulo y augurio de los nuevos tiempos en la institución, en los que Lilia Cedillo no tendrá problema para reelegirse.
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